Frenan regreso de indígenas a sus comunidades

CIUDAD DE MÉXICO.- El gobierno de Chiapas impidió este jueves regresar a sus comunidades a los indígenas acusados por la matanza de Acteal que liberó la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sacándolos en camión y trasladándolos a un hotel aislado por considerar que no hay condiciones para su retorno a Chenalhó.

Los veinte liberados fueron sacados del Cereso a las 3:35 horas de este jueves por una puerta trasera sin permitirle a un grupo de ellos tener contacto con sus abogados, del Centro de Investigación y Docencia Económica ( CIDE).

El director del penal, Mario Eduardo de León Castillejos, agilizó los trámites para la salida de los veinte indígenas en coordinación con Juana García Palomares de la Sociedad de Productores Agrícolas de los Altos de Chiapas, mientras demoraba el ingreso de los bogados del CIDE.

El equipo de defensa de la institución académica, encabezado por Javier Angulo, arribó a El Amate a las 23:45, llevando consigo copia de la resolución de la Corte, pero el director del reclusorio no autorizó su ingreso pese a solicitarlo en varias ocasiones.

Los abogados incluso intentaron presentar una denuncia de hechos antes el ministerio público de Cintalapa, por la demora indebida de las autoridades del penal en acatar la disposición de la Corte y liberar a su representados.

Finalmente, al filo de las tres horas, las autoridades del centro penitenciario organizaron un operativo para distraer a la prensa que esperaba en la entrada, sacando dos camionetas con vidrios polarizados, para aparentar que en su interior iban los liberados.

Mientras tanto, los subieron a un camión estacionado a un lado del área de sentenciados con el que salieron rápidamente cerrando las puertas del penal y dejando en su interior a parte del equipo de abogados.

Se inició entonces una persecución por carretera de casi dos horas y concluyó frente al hotel El Encanto, ubicado en el municipio de Berriozabal al que fueron trasladados los indígenas liberados.

Juana García Palomares rechazó que los indígenas fueran rehenes o un "botín político" cuando Alejandro Madrazo, uno de los abogados del CIDE detuvo el camión y exigió hablar con sus representados.

Los indígenas continúan en el hotel, donde algunos se reunieron con sus familias, pero la mayoría manifestó su deseo de regresar a Acteal.

Juana García Palomares, aseguró que en reuniones con representantes del gobierno estatal se determinó que no hay condiciones para el regreso de los liberados a sus comunidades, y que la manera en que fueron excarcelados de El Amate tiene como objetivo buscar la reconciliación entre los grupos confrontados.