Federales arman “rompecabezas” de los ataques en Morelia

MORELIA, Mich.- Investigadores federales que trabajan en la construcción del rompecabezas del atentado del pasado 15 de septiembre, que costó la vida de ocho personas y dejó heridas a otra centena, siguen una pista que apunta hacía la probable ruta de escape que utilizaron tres de los presuntos perpetradores.
Datos que son investigados por la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas en Delincuencia Organizada (SIEDO) señalan que después de la detonación de las granadas, tres de los presuntos participantes en el atentado huyeron del Centro Histórico vestidos como policías del Grupo de Operaciones Especiales (Goes) y que al llegar a los suburbios de la ciudad, donde eran esperados por otras personas, escaparon a bordo de tres vehículos, dos con placas de Guerrero y uno de Jalisco.
Los investigadores también conocen que uno de los tres presuntos perpetradores tiene el alias o la clave de “Zorro”.
De acuerdo con los datos en poder de la SIEDO, los tres sospechosos iban vestidos con uniformes negros con las siglas Goes en la espalda, aunque debajo de éstos traían ropa de civil. Al llegar al punto donde se encontraban los tres vehículos se quitaron los uniformes, se quedaron con la ropa que traían debajo, se colocaron sombreros y guardaron los uniformes en la cajuela de un automóvil Jetta que aunque tenía las placas cubiertas con cinta adhesiva tenía un engomado del Estado de Guerrero.
Además del Jetta, también abordaron una camioneta Silverado, con placas de Jalisco y una minivan, modelo Windstar, con placas de Guerrero.
Los tres sospechosos tenían corte tipo militar y acento costeño.
Los datos que investiga la SIEDO, a los que también tuvo acceso “El Universal”, revelan que los tres hombres que iban vestidos con ropa del GOES se verían con otras personas en un lugar denominado Sarigüeya. En esta capital hay un par de bares conocidos con ese nombre.
Mientras, los encargados de las investigaciones iniciarán la confronta de más de un millón de rostros y huellas contenidas en el padrón de licencias de conducir, ya que con ello se podrán comparar sus caras con la que pudieran aparecer en videos o fotografías en el sitio donde ocurrieron los hechos.