Es 95% confiable la policía de Tijuana: SSP

TIJUANA, BAJA CALIFORNIA (05/OCT/2010).- El secretario de Seguridad Pública de Tijuana, Julián Leyzaola Pérez, aseguró que el 95% de la corporación que encabeza es confiable gracias a la depuración y vigilancia que promovió desde su llegada al cargo, en diciembre del 2007, cuando inició la Alcaldía panista que concluirá el 30 de noviembre.

Calificó que la publicación de un reportaje en la revista Proceso, que señala a las policías Municipal y Estatal Preventiva como "leales" al cártel Arellano Félix, o a cualquier banda delictiva que les pague por servirles, está desfasado dos años porque en ese mismo periodo logró revertir la corrupción que imperaba al interior de las filas.

"La corporación está al mando mío", advirtió y dijo que la información fue ofrecida por ex-agentes que están presos por sus nexos con el crimen organizado, y describe la situación de la corporación cuando él asumió el cargo, primero como director de la Policía Municipal, y luego como secretario de Seguridad Pública de Tijuana.

En entrevista con periodistas de Tijuana, Leyzaola Pérez aseguró que entregará una corporación totalmente distinta a la que recibió.

Teniente coronel retirado del Ejército, al secretario de Seguridad Pública local se le atribuye haber contenido la ola violenta que afectaba la zona, en coordinación con los militares y otras corporaciones.

Consideró que la publicación de la revista está "como dos años y cacho fuera de lugar" porque la corporación que dirige es 95% confiable después de la depuración que ha logrado desde principios de su gestión.

Datos proporcionados por el Ayuntamiento local indican que más de 600 elementos de la policía municipal han sido dados de baja por nexos con el crimen organizado, entre otros motivos.

Reconoció sin embargo que la transformación no se ha logrado de forma definitiva porque "hay alguno que otro policía mordelón y abusivo" o que creen que pueden servirse del uniforme, no servir a la comunidad.

Pero, definitivamente ya no existen los agentes que trabajaron para las organizaciones criminales, las que, admitió, han intentado acercarse de nuevo a la corporación sin lograrlo porque la cabeza de la corporación está atenta al comportamiento de las filas de uniformados, afirmó Leyzaola Pérez.

Dijo que aun cuando no se considera que algún agente reciba pagos de la delincuencia organizada, habrá quien esté en espera de "los buenos tiempos" y levantar la cabeza de nuevo para seguir involucrándose con las bandas delictivas.

La información publicada por la revista Proceso asegura que, de acuerdo con la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/135/2010, comandantes, patrulleros, agentes del Ministerio Público y policías de la calle "cumplen una función en la red de protección a narcotraficantes, sicarios y secuestradores".

Refiere la declaración de dos agentes que se acogieron al programa de testigos protegidos, y detallan la relación de la corporación con el cártel Arellano Félix, encabezado actualmente por Fernando Sánchez Arellano "el Ingeniero", pero también con otras bandas del crimen organizado que operan aquí y pagan por protección.

Uno de los testigos fue detenido en el 2008 y refiere que cuando estuvo en la corporación, los mandos recibían pagos por apoyar las actividades criminales.

El otro sostiene que desde el 2004 y principios del 2010, su función fue la de proporcionar teléfonos celulares y dos mil dólares estadounidenses a los jefes de las delegaciones de la Policía Municipal para que liberaran a los integrantes de las bandas delictivas que les pagaran que hubieran detenido.

A los presuntos delincuentes liberados los sustituían por otros individuos que detenían al azar, afirma la información publicada.