El ataque a casino deja al menos 53 civiles muertos

MONTERREY, NUEVO LEÓN (26/AGO/2011).- El crimen organizado demostró una vez más su falta de escrúpulos al incendiar un casino con civiles dentro.

Hasta el cierre de la edición el saldo de muertos era de 53, aunque los cuerpos de rescate tenían la orden de trabajar a marchas forzadas y continuar toda la noche para encontrar a todas las víctimas.

Hace cinco días un grupo armado atacó una patrulla afuera del estadio del Santos Laguna, provocando pánico entre los miles de asistentes al partido y la indignación del país. Las autoridades aclararon que fue un hecho aislado y destacaron que el ataque no fue contra la población, sino contra la autoridad, pero ayer fue distinto.

Alrededor de las 15:50  horas un comando armado de alrededor de seis hombres entró al Casino Royale –ubicado en  el cruce de las calles Jesús María Fernández y San Jerónimo, al poniente de Monterrey– y tras advertir a los presentes que salieran porque iba a incendiar el lugar, rociaron un líquido inflamable, al parecer gasolina, hicieron disparos y posteriormente lanzaron al menos una granada. La casa de apuestas comenzó a arder en llamas y el segundo piso se colapsó debido al incendio.

Tras el atentado comenzó la movilización policiaca y de emergencias. Militares y policías federales cerraron las salidas de la Zona Metropolitana para intentar encontrar a los culpables, que hasta el cierre de la edición no había sido detenidos.

Las ambulancias llegaban por decenas, mientras los bomberos luchaban contra el fuego, que lograron apagar despúes de cuatro horas.

Seis, 10, 22, 40, la cifra de muertos fue creciendo conforme pasaron los minutos.

El director de Protección Civil, Jorge Camacho, explicó que la magnitud de  la tragedia se debió a que al oír las detonaciones causadas por el incendio,  las personas que se encontraban en el interior del casino se refugiaron en los  baños u oficinas en vez de usar la salida de emergencia, sin saber que el fuego  se propagaba rápidamente en el interior del lugar.

Una mujer afirmó que todas las salidas de emergencia estaban cerradas con llave, lo que sin duda acrecentó el número de víctimas mortales.

Otro mencionó: “Entraron las personas, vi a uno de ellos, era pelón, nos dijo unas  palabras horribles y luego nos gritó ‘todos al piso’”.

Para poder rescatar a las personas atrapadas y recuperar los cuerpos, los bomberos y socorristas tuvieron que romper las paredes con una retroexcavadora.

El móvil del acto de “terror y barbarie”, como lo calificó el Presidente Felipe Calderón, todavía no está claro.

Sin embargo, versiones periodísticas señalan que varios casinos y centro nocturnos de Monterrey han sido atacados en los últimos meses porque sus dueños se han  negado a pagar extorsiones.

El gobernador Rodrigo Medina pidió apoyo a la Procuraduría General de la República (PGR) y el Presidente ordenó al secretario de Gobernación, Francisco Blake, trasladarse a Monterrey para encabezar las investigaciones.

Calderón sostendrá hoy una reunión de emergencia con el gabinete de seguridad para tomar medidas.

Fernando Larrazábal, alcalde de Monterrey, informó que el casino fue clausurado el pasado 4 de mayo, pero los abogados de la empresa lograron con argucias legales que un tribunal lograra que se levantaran los sellos y reanudara operaciones.

El casino –que abrió tres años y medio– es propiedad del Grupo Royale, que posee establecimientos en las ciudades de Monterrey, Mazatlán, Los Cabos y
Escobedo.

El de ayer es el segundo ataque contra una casa de apuestas en dos días, el miércoles, un comando atentó contra la casa de apuestas del Grupo Caliente en Saltillo, aunque las autoridades no reportaron víctimas.

PARA SABER
La CNDH abre expediente

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) abrió un expediente de atención victimológica por el atentado contra el Casino Royale, para que los afectados cuenten con atención médica y psicológica, así como orientación jurídica.

TESTIMONIOS
Dijeron que iban a incendiar

MONTERREY.- El Casino Royal de Monterrey fue atacado por hombres armados que llegaron en al menos cuatro vehículos, a las 15:20 horas, al cruce de avenida San Jerónimo y la calle Jesús María Fernández.

Después de alertar a los clientes que se encontraban en la planta baja, rociaron de gasolina, dispararon armas de fuego y lanzaron al menos un artefacto explosivo que provocó un incendio en el lugar.

“Estuvo horrible, no se puede expresar con palabras”, contó una testigo de los hechos.

La gente corría y corría, después de que los hombres armados. “Llegaron y le dijeron a la gente que se saliera porque iban a incendiar el lugar”.

“Todas las salidas de emergencia estaban cerradas con llave”, afirmó otra testigo que logró escapar.