El IFE se declara listo para situación excepcional

CIUDAD DE MÉXICO (24/OCT/2013).- Ante la posibilidad de que el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) quede incompleto por un tiempo indefinido, el secretario ejecutivo del órgano, Edmundo Jacobo Molina, garantizó que el personal apoyará a los cuatro consejeros que se queden y durante el tiempo que sea necesario, para cumplir con las funciones encomendadas.

"Sea cual sea la decisión que tomen los legisladores, sea cual sea la circunstancia en que deba operar este Consejo General en el futuro próximo, hoy por hoy es una institución fortalecida", planteó.

"Sus funcionarios conocen bien la agenda y los retos institucionales a enfrentar. Sabrán apoyar con eficiencia probada, a la señora y señores consejeros en su labor" dijo el funcionario.

Al presentar el último informe de Programas y Proyectos de la gestión del consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita, Jacobo Molina estableció que el instituto "se encuentra preparado para cumplir plenamente con sus atribuciones y funciones legales ante la situación excepcional que este Consejo General quede conformado con sólo cuatro de sus integrantes".

El informe de Valdés, destacó la consejera María Marván, fue "una suerte de corte de caja, en su doble función de Presidente del Consejo General y de la Junta General Ejecutiva".

Pero además del balance, durante larga sesión realizada ayer por el Consejo General del IFE, consejeros y representantes partidistas adelantaron informalmente su despedida, aunque aún se podrían realizar 2 sesiones más.

También hubo agradecimientos y deseos de buena suerte en ocasión del informe final del consejero Alfredo Figueroa como presidente de la Comisión de Quejas.

"Vamos a empezar como en las fiestas de pueblo con los festejos y con los reconocimientos que requiere un consejero comprometido con la institución" indicó el consejero Marco Antonio Baños.

También a punto de concluir sus funciones, el consejero Francisco Guerrero vislumbró una transición en la "incertidumbre".

Pero el IFE seguirá en cumplimiento de sus funciones "lo hicimos cuando éramos seis consejeros, lo hicimos cuando fuimos nueve, lo hemos seguido haciendo ahora que somos ocho y estoy seguro que (también) los colegas que continuarán en las labores del Instituto en este periodo incierto de transición que se avecina".

Incluso ante la posibilidad de que el Congreso decida relevar a todo el Consejo para dar paso al Instituto Nacional de Elecciones con nuevos integrantes, el consejero presidente, Leonardo Valdés, hizo una defensa de la renovación escalonada del IFE establecida en la reforma del 2007.

Eso ha permitido al IFE que "se mantenga la experiencia institucional", indicó.

En el transcurso de la sesión los consejeros plantearon a los legisladores valorar la permanencia de funciones que han sido relevantes para el IFE, como la de dictar medidas cautelares, que "ha sido especialmente importante para que los procesos electorales se conduzcan en los mejores términos de equidad en la competencia".

El consejero Alfredo Figueroa advirtió que si la justicia electoral en su dimensión administrativa se traslada a la autoridad judicial, sería necesario modificar todo el sistema judicial mexicano.

"Estará en el marco de los legisladores el determinar si este instrumento de enorme utilidad para la democracia, ejercido me parece con responsabilidad por parte de esta autoridad, debe trasladarse a otras autoridades".

De cara a una decisión legislativa, indicó a su vez el consejero Lorenzo Córdova, será deseable que se valore la experiencia institucional para el fortalecimiento del IFE "o de lo que venga", de sus capacidades de justicia electoral para identificar, prevenir y, eventualmente, sancionar conductas ilícitas.