El IFE reorganiza a sus órganos internos

CIUDAD DE MÉXICO (20/FEB/2013).- Luego de la renuncia del consejero Sergio García Ramírez, el Consejo General del IFE efectuará una reorganización e integración provisional de sus órganos de trabajo para atender los pendientes, mientras la Cámara de Diputados elige al consejero faltante.

Con el propósito anterior, eligió al consejero Alfredo Figueroa para presidir la Comisión de Quejas y Denuncias, y al consejero Marco Antonio Baños para encabezar la Comisión del Servicio Profesional Electoral.

En su sesión de este miércoles, el Consejo General del IFE exhortó a la Cámara de Diputados para que, en ejercicio de sus atribuciones, elija al consejero faltante a la brevedad posible, y alejar "el fantasma de los empates", debido a sólo quedaron ocho consejeros.

El consejero presidente, Leonardo Valdés Zurita, recordó que no es la primera vez que el IFE se ve obligado a replantear las cargas de trabajo y reorganizar los órganos internos, pues en dos ocasiones anteriores ya funcionó con una integración incompleta.

La primera fue entre diciembre de 2007 y febrero de 2008, cuando renunció el entonces consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde; la otra, el periodo de noviembre de 2010 a diciembre de 2011, cuando la Cámara de Diputados no logró consenso para nombrar a tres nuevos consejeros, ante la salida de los que cumplieron su periodo.

Recordó que a pesar de esas condiciones, el Instituto Federal Electoral (IFE) fue capaz de dar continuidad a los compromisos y sacar adelante el trabajo electoral que le impone la ley.

El Consejo General aprobó por unanimidad crear un grupo de trabajo integrado por los consejeros Marco Antonio Baños, Lorenzo Córdova, Alfredo Figueroa, Francisco Javier Guerrero y Benito Nacif para dar seguimiento a los procedimientos de revisión y resolución a los informes anuales de 2012 que presentan los partidos políticos.

Ese trabajo de revisión corresponde a la Unidad de Fiscalización de los Recursos de los Partidos Políticos, organismo que tiene plenitud de autonomía de gestión.

Por esa razón, los consejeros integrantes de ese grupo de trabajo sólo podrán hacer observaciones y recomendaciones al trabajo de la Unidad de Fiscalización, teniendo presente que la información, los documentos y materiales en los que la unidad fundamente su trabajo, tienen carácter de reservado, y no se podrán hacer públicos hasta que se debatan en el seno del Consejo General.