Miércoles, 27 de Noviembre 2024
México | SERPIENTES Y ESCALERAS POR SALVADOR GARCÍA SOTO

Duelo de poderes

En las 10 propuestas del Presidente hay planteamientos de fondo

Por: EL INFORMADOR

Parte de las reformas que el Presidente Felipe Calderón propuso ayer al Congreso fueron discutidas y negociadas en la Mesa para la Reforma del Estado que se instaló en 2007 en el Senado de la República. En ese tiempo, ni el presidente ni el PAN permitieron que avanzaran iniciativas como el referéndum, la iniciativa popular o la reelección de alcaldes y legisladores, y frenaron todo el paquete por una iniciativa que no aceptaban: la creación de una jefatura de Gabinete, propuesta por el Presidente y nombrada por el Congreso.

Ésa es la principal diferencia entre el decálogo de reformas que presentó ayer el Presidente y el paquete de iniciativas que surgieron de la CENCA del Senado en marzo de 2007: mientras la propuesta de Reforma del Estado de los senadores proponía un viraje en el régimen político y de gobierno, para pasar del presidencialismo puro a un semiparlamentarismo, donde el Congreso ganaba facultades —como nombrar al jefe de Gabinete y ratificar a los secretarios de Estado—, en la propuesta de Calderón se mantiene intacto el régimen presidencial, e incluso se propone aumentar facultades al Poder Ejecutivo por encima del Congreso. Ése es el duelo que se va a dar entre las dos propuestas, y es en el fondo un duelo de poderes, el Ejecutivo y el Legislativo, para ver cuál se impone y gana terreno en el rediseño necesario y urgente del sistema político y de gobierno.  

En las 10 propuestas del Presidente hay planteamientos de fondo, como romper el monopolio de la representación política de los partidos con las candidaturas independientes o ciudadanas, o eliminar el derecho de iniciativa exclusivo de los legisladores con las iniciativas ciudadanas, sin dejar de resaltar la creación del referéndum como forma de democracia participativa o la reelección de diputados y alcaldes. Varias de esas propuestas provienen de la exigencia ciudadana y tienen un amplio respaldo social. El problema es que no será el criterio ciudadano, ni siquiera el criterio del Presidente el que defina los tiempos para discutir, dictaminar y votar esas iniciativas, sino el criterio de la agenda de la mayoría priista en el Congreso el que defina el futuro de las 10 propuestas de Calderón. Y en la agenda del PRI se ven mucho más preocupados y ocupados de las 11 elecciones para gobernador en 2010 que en la reforma política de Calderón.

Así que veremos una vez más repetirse el numerito de las mesas de negociación, los foros de expertos y académicos, las consultas públicas, todo para que al final lleguen a las mismas propuestas que deambulan en el Congreso desde la reforma de 1996 y que hoy retoma Calderón para presentarlas como la gran novedad.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones