Negó además ante diputados federales que existan diferencias entre los integrantes del gabinete de Seguridad, y sostuvo que tiene una gran amistad con el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora.Ante la insistencia de los reporteros sobre la posibilidad de que el secretario renuncie a su cargo si en un mes no se concretan resultados del Acuerdo Nacional para la Seguridad, García Luna declaró que tiene una encomienda que va a realizar en la que pone todo su empeño cada día."No voy a renunciar, a menos que el señor Presidente así lo determine", manifestó.El funcionario sostuvo este mediodía una reunión de trabajo con integrantes de la Comisión Nacional de Seguridad Pública de la Cámara baja, quienes pese a cuestionar los escasos resultados de las políticas públicas en la materia no pusieron en aprietos en ningún momento a García Luna.Entre los más críticos, la diputada Layda Sansores preguntó por las diferencias en el gabinete de seguridad, que estarían incidiendo en la falta de resultados y el subejercicio en los fondos de seguridad pública destinado a los gobiernos de los estados y municipios.La respuesta del funcionario al tema de las discrepancias en el gabinete es que esa visión "no corresponde a la realidad", y la misma respuesta dio entorno a la renuncia del secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Roberto Campa.Sobre este último, en conferencia de prensa posterior a la reunión, rechazó que su salida haya obedecido a problemas con el proceso de licitación del chip y las calcomanías del Registro Público Vehicular por un eventual conflicto de intereses.Aclaró que el proceso de licitación está en curso y que en revisión permanente por parte de la Secretaría de la Función Pública."Aún no se define que empresa va a ganar", precisó.