De frente y de perfil

Pasado ya el proceso comicial de Baja California Sur, los partidos enfocan sus baterías a lo que está considerado como la gran apuesta electoral del presente año y la antesala de la elección presidencial del próximo año.

Son cuatro los estados que irán a las urnas en julio, en tres de ellos se elegirá gobernador (Estado de México, Coahuila y Nayarit) y en el otro (Hidalgo) autoridades municipales, aunque la atención se centra en una sola de las entidades: el Estado de México.

Y aunque la elección de gobernador de esa Entidad esté considerada como la más importante de todas cuantas puedan presentarse, los otros dos gobiernos estatales en disputa guardan singular importancia.

Se trata de Coahuila y Nayarit, que por razones distintas tienen gran significación para los partidos políticos.

En el primero de los estados mencionados el candidato que presenta el PRI es Rubén Moreira Valdés, hermano del gobernador con licencia y presidente electo del PRI, Humberto Moreira Valdés.

La relación fraterna de estos personajes reviste a este proceso electoral de gran interés, ya que los adversarios saben que si le arrebatan el territorio al ya para ese entonces presidente en funciones del partido tricolor, lo dejarán en una situación casi de inmovilidad y sumamente frágil al partido con vistas a la sucesión presidencial.

De eso están conscientes los hermanos Moreira Valdés los que tienen trabajado el Estado, por lo que resulta difícil que sucede, toda vez que el menor de los familiares entrega una herencia estatal del partido ventajosa para el mayor.

Antes de saltar a la presidencia del partido o siquiera mencionar esa aspiración, Humberto trabajó arduamente en la Entidad, pero no solamente como gobernador, sino también como dirigente político y partidista, creando una serie de cuadros del partido tricolor que redundaron en los triunfos electorales que le permitió recuperar ayuntamientos que la oposición mantuvo por largos períodos como es el caso de Torreón, donde el PAN se atrincheró durante varios trienios.

Coahuila fue un Estado susceptible de pasar a convertirse en una estrella más dentro del firmamento panista, cuando Rosendo Villarreal obtuvo la alcaldía de Saltillo, desde donde se postuló al Gobierno estatal.

No lo consiguió, pero la clientela electoral de ese municipio, añadida a la de Torreón, significó un grave riesgo para el partido tricolor, el que fue combatido con las postulaciones de dos candidatos populares: Enrique Martínez y Humberto Moreira Valdés.

El primero de ellos, representa a la clase pudiente del Estado, ya que se trata de uno de los principales empresarios, quien además de ello tuvo que esperar seis años más para convertirse en candidato, luego de que Rogelio Montemayor lo desplazó de una candidatura que ya sentía en las manos.

Contrario a lo que sucede en la actualidad, Martínez supo esperar el momento y con disciplina dejó pasar al amigo del presidente en turno, lo que le valió la candidatura.

El Gobierno de Martinez y Martínez fue simplemente anodino, aunque logró consolidar un equipo de trabajo importante del que surgió el propio Moreira Valdés, el que fue llevado de la mano hasta desembocar en la candidatura al Gobierno del Estado.

Enrique Martínez creyó que con su reducida popularidad, circunscrita a Coahuila y con el gran capital económico concentrado se convertiría en un contendiente serio por la candidatura presidencial, por lo que integró al Tucom (Todos Unidos Contra Madrazo), donde fue ubicado en su realidad.

Sin embargo, su gran acierto fue la nominación de Humberto Moreira, quien rescató de las manos opositoras las principales posiciones que le habían arrebatado los adversarios del PRI.

Por eso, un triunfo opositor en Coahuila conllevaría varios mensajes, el debilitamiento del presidente del partido y el sentar un precedente de lo que podría suceder unos meses después en Michoacán, donde competirá con las siglas del PAN, Luisa María, la hermana del Presidente Felipe Calderón.

Nayarit guarda otras connotaciones, aunque también representa varias lecturas.
La Entidad está considerada como uno de los reductos de la profesora Elba Esther Gordillo, por la alianza  que esta mantiene con el gobernador Ney González.

Derrotar la alianza de este dúo (gobernador-SNTE) será uno de los propósitos de los partidos opositores, los que preparan un antídoto similar con la constitución de una alianza entre derecha e izquierda que tan efectiva les ha resultado en otros estados.

Si el resultado de Guerrero les fue favorable, aunque solamente fuese de facto la alianza, estableciéndola como se perfila en Nayarit, los representantes del PRD, PT, Convergencia y el PAN, siente que la Entidad está casi en sus manos y que será cuestión de simple protocolo el consolidarla.

Nayarit se aprecia como una plaza con grandes posibilidades para la coalición de derecha e izquierda, principalmente porque el Gobierno de Ney ha sido simplemente desastroso.

Claro que el resultado por todos esperados en esa fecha del 3 de julio será el del Estado de México, aunque los observadores no podrán perder de vista los otros dos que junto con los ayuntamientos de Hidalgo irán en la misma fecha a las urnas.

Cancelar Cédula de Identidad

El PRI solicitará la cancelación de la Cédula de Identidad, por considerar que lo primordial es la protección de los datos personales de la ciudadanía.