De frente y de perfil

Qué pasa en Tabasco que todos los años se inunda, provoca daños cuantiosos, deja miles de damnificados y nadie encuentra la fórmula para evitar estos desastres.

De quién es la responsabilidad de este juego perverso, donde la vida y patrimonio de miles de personas es puesta en subasta una y otra vez, en un toma y daca macabro entre los gobiernos federal y estatal.

Será que a nadie le importa la suerte que corran los habitantes de este generoso Estado que contribuye en gran parte con la producción petrolera y que aporta gran riqueza al país en todos los órdenes, político, económico, cultural, social, etcétera.
Por tercer año consecutivo, el Estado se encuentra bajo el agua, 12 municipios de los 17 que componen la nomenclatura de la Entidad, han sido declarados zonas de desastre y la ayuda por parte de la Federación se restringe.

El Presidente Felipe Calderón visitó parte de la zona del desastre. El gobernador Andrés Rafael Granier Melo solicitó, nuevamente, partidas especiales para la atención de los damnificados, sin obtener respuesta.

Por eso, el propio Ejecutivo estatal acudió a la sede senatorial para clamar por esa ayuda y lo que recibió fue una dura respuesta por parte de algunos legisladores.
Tal fue el caso del senador Ricardo Monreal Ávila, quien señaló a las autoridades estatales y federales como responsables de las constantes tragedias que vive esa zona del Sureste mexicano.

El ex gobernador de Zacatecas fue duro con sus comentarios sobre las peticiones del gobernador Granier Melo, ya que consideró que las aportaciones dadas al Gobierno estatal han sido cuantiosas y éstas no se reflejan en obras de prevención.
Y es que el gobernador Granier Melo declaró en quiebra técnica las finanzas estatales, por lo que la Administración manifestaba su insolvencia económica para atender la grave crisis provocada por la contingencia.

Según relató Monreal Ávila, Tabasco es una Entidad privilegiada en la atención de obras hidráulicas, recibiendo nueve mil millones de pesos en un lapso comprendido entre 1997 y 2009, sin que se reflejen esas obras, ya que la prevención para las inundaciones se remonta al amontonamiento de costales en algunas zonas.

Dónde quedaron esos recursos, se preguntó el senador, ya que en Tabasco se habla de corrupción en todos los niveles, se acusa al anterior gerente de Conagua de malos manejos, se mencionan licitaciones manipuladas, negocios al por mayor, tráfico de influencias, bonos de fatiga, subejercicio, compras arregladas, se comportan como sátrapas, medrando con un pueblo duramente castigado por la crisis y las contingencias.

El senador pidió al gobernador Granier Melo explicación sobre el destino y el monto de los recursos destinados por el Gobierno estatal para obras de prevención de las inundaciones y consideró que tanto el Gobierno federal como el estatal no han realizado obras algunas para evitar tanto desastre.
Actúan con negligencia, dijo, ya que la UNAM consideró que las tragedias de 2007, 2008, 2009 y la actual pudieron evitarse y que han dejado de lado el Plan Hídrico, para privilegiar la generación de energía eléctrica.

Y es que, añadió, es parte de la privatización de la energía eléctrica, como dijo el propio gobernador Granier Melo.

Las constantes inundaciones en Tabasco, consideró Monreal Ávila, ante el gobernador de Tabasco son, en gran parte, responsabilidad de los gobiernos, ya que no existe el reordenamiento del desarrollo urbano, no hay obras de prevención y existe un manejo irresponsable de los recursos asignados.

Por eso, las acusaciones de uno y otro lado –entre el Gobierno estatal y Conagua— son una muestra de unos y otros para eludir sus propias responsabilidades.

Pero los señalamientos del senador Monreal y la crítica mordaz y aguda no son las únicas recibidas por el Gobierno de Tabasco, ya que el diputado federal, Adán Augusto López Hernández hizo lo propio, pero además propuso al Ejecutivo estatal encabezar una demanda en contra de la Conagua por todos los daños ocasionados al Estado, misma que estaría respaldada por los partidos de oposición, al tiempo que pidió al gobernador Granier Melo que se dejara de pagar a la CFE y usar ese dinero como recursos del Fonden para la atención de los damnificados.

La propuesta de López Hernández sería simplemente eso, si en el fondo del asunto no se encontrara la sucesión gubernamental en Tabasco, donde por un lado corre el secretario de Gobierno, Humberto Mayans Canabal, considerado como el candidato-delfín del gobernador y por el otro la senadora Rosalía López Hernández.

Para quienes desconocen la trayectoria de uno y otro, Mayans Canabal se reintegró al PRI, luego de una década dentro del partido del sol amarillo y es cuñado de Adán Augusto y de la propia Rosalía, quien es también hermana de Adán Augusto.

*De lo ocurrido el domingo en Zacatecas, con un discurso fuerte y frontal contra la Administración saliente por parte del nuevo gobernador y de las acciones a seguir en materia de auditorías, tomó nota el mandatario de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz.