Consejo perredista concluye en medio de agresiones

CIUDAD DE MÉXICO (12/SEP/2010).- El pleno del Consejo Nacional del Partido de la Revolución Democrática ( PRD) concluyó a la medianoche en medio de insultos, gritos, toma de tribunas, mesas desplomadas y la decisión de no discutir, por el momento, la sucesión anticipada de Jesús Ortega al frente de este organismo político.

El Grupo de los Ocho (G8), opositor a Ortega encabezado por las corrientes Izquierda Democrática Nacional (IDN) de Dolores Padierna y Democracia Social del senador Carlos Sotelo, perdió en serie todas las votaciones incluida por 143 contra 92 la de incorporar a la orden del día la renovación adelantada.

El grupo opositor al presidente nacional perredista exigía que en diciembre se realizará la elección de la nueva dirigencia nacional del PRD a través de Consejo Nacional que se instauraría en Consejo Electivo o en marzo de 2011 mediante elecciones nacionales en urna.

El sector mayoritario, leal a Ortega, proponía que en diciembre se emitiera la convocatoria para la elección de la nueva dirigencia y en marzo, en Consejo Electivo, se eligiera al sucesor. Argumentó que no se podía elegir en esa fecha en urnas porque no hay padrón de militantes pues está en elaboración y concluirá el 31 de mayo próximo.

Así pues, después de que el G-8 perdió ante la mayoría de Nueva Izquierda, Foro Nuevo Sol y Alternativa Democrática Nacional, la posibilidad de discutir la salida de Ortega fijó posición a través de senador Carlos  Sotelo quien tras criticar las decisiones e la dirigencia nacional y el proceso de integración del nuevo padrón perredista llamó a tomar la tribuna.

Pero mientras Sotelo lanzaba las críticas algunos consejeros lo acusaron de entregar Baja California Sur y Puebla al PRI, lo tildaron de "traidor", pues ante de crear Democracia Social pertenecía a Nueva Izquierda, la corriente que encabeza Ortega.

El G-8 respondió con gritos de "Obrador, Obrador", "fuera chuchos, fuera chuchos", "ni PRI ni PAN" y comenzaron a subir a la tribuna y la tomaron, eran unos 40 consejeros. Algunos del grupo leal a Ortega trataron de colocar mesas para impedir que tomaran la tribuna pero se replegaron de inmediato.

Entre insultos y gritos de los dos bandos se tomó la tribuna. Entonces se desplomaron las mesas del templete. El G-8 exigía un receso para construir un acuerdo político y no perder la oportunidad de que se discutiera la salida de Jesús Ortega de la presidencia nacional del PRD.

En medio del caos los senadores Graco Ramírez y Carlos Navarrete se acercaron a Jesús Ortega, Jesús Zambrano y Hortensia Aragón. Después de unos minutos designaron a Miguel Barbosa Huerta, coordinador nacional de Nueva Izquierda, para proponer un receso indefinido. Se aceptó.

Ante la situación "y para evitar que el tema escalara", comentó el diputado Jesús Zambrano, se decidió instalar una mesa política de diálogo entre los dos grupos que comenzará a operar a partir del próximo lunes "para ver la posibilidad de acuerdos".

Apuntó que a partir de lo sucedido en este pleno del Consejo Nacional del PRD en diciembre no habrá renovación de dirigencia. Dijo que para emitir la convocatoria para esa sucesión debe haber acuerdos entre los dos grupos por lo que no se garantiza que la próxima directiva sea electa en marzo de 2011.