Campesinos de SLP denuncian explotación laboral

MONTERREY, NUEVO LEÓN (30/ENE/2016).- Campesinos de San Luis Potosí fueron engañados con un buen empleo, que incluía comida, transporte y hospedaje, pero estando en la ciudad fueron explotados en jornadas de 14 horas diarias y al final no se les pagó ni un peso del salario devengado durante la primera semana, se les retuvo su documentación original y carecen de recursos para regresar a su tierra.

El hecho se lo adjudican a la empresa Actividades de Limpieza Acuario del Norte S.A. de C.V.; la agrupación Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos presentará, con el consentimiento de los afectados, una denuncia por el presunto delito de trata de personas para explotación laboral.

Los integrantes de un grupo de 10 campesinos del ejido Antiguo Primavera, de Tamuín, San Luis Potosí, explicaron que el 13 de enero fue a su comunidad Santiago Vega, originario de la misma población, invitándolos a trabajar en Monterrey en tiendas Soriana.

“Nos dijo que el sueldo era bueno, que no íbamos a pagar hospedaje, pasajes ni comida", explicó uno de los afectados.

"La salida fue el 14 de enero. Un joven llamado Gustavo nos recogió. Nos llevó a una casa en la colonia Primero de Mayo y al día siguiente pasó por nosotros y nos llevó a una oficina de la calle Vicente Suárez 1612, en la colonia Terminal”, continuó.

Hasta las 14:00 horas los atendió la encargada de recursos humanos y fue cuando les informó que iban a realizar trabajos de limpieza, por un pago de mil 700 pesos por semana; sin embargo, no se les advirtió que el salario sería por jornadas diarias de 14 horas.

Más tarde se les informó que cada uno pagaría 500 pesos por el hogar que se les facilitó.

Después de laborar la primera semana del 16 al 22 de enero, el día 23 le hablaron al patrón para que les pagara y los citó el día 24; sin embargo, dado que a las 09:00 horas no había llegado, optaron por regresar a la vivienda.

El hecho motivó el enojo del patrón, quien más tarde fue a la casa, los despidió y se negó a devolverles su INE y CURP.

Los campesinos optaron por presentar una queja ante la Procuraduría para la Defensa del Trabajo y el empresario no acudió a la primera cita, mientras que a la segunda, que fue este viernes, sólo acudió un abogado.