México | ITINERARIO POLÍTICO POR RICARDO ALEMÁN Cabañas: futbol, antros y corrupción Preferimos satanizar diversión y desvelo —con el aderezo que a cada quien le plazca—, para no ver el problema de fondo Por: EL INFORMADOR 26 de enero de 2010 - 05:30 hs ¿Qué hacía Cabañas en un antro a las cinco de la mañana? Con un tufo de morbo, la anterior fue la primera pregunta que muchos se hicieron al conocer la agresión de que fue víctima el futbolista Salvador Cabañas. No pocos se escandalizaron de que un profesional del espectáculo deportivo —de primer nivel y estrella del equipo América— guste de la fiesta hasta horas de la madrugada, al tiempo que otras voces justificaron la agresión a partir de una simplificación mojigata: “Se lo buscó, ¿a quién se le ocurre?”. Es decir, preferimos satanizar diversión y desvelo —con el aderezo que a cada quien le plazca—, para no ver el problema de fondo. ¿Y cual es ese problema? Todos lo conocemos, lo padecemos; pero también todos o casi todos somos corresponsables, porque lo estimulamos. Hablamos de la corrupción oficial, del “no me importa” de gobiernos delegacionales y del Departamento del Distrito Federal, ante la anarquía, corruptelas, degradación —y no se diga adulteración de bebidas— en que operan todos los antros de toda la capital del país. Al analizar la tragedia que vive Cabañas, no se debe interrogar a partir del morbo o la mojigatería. ¿Qué hacía Cabañas en el Bar-Bar casi a las seis de la mañana? ¿Cómo un deportista profesional se pasa de fiesta toda la noche? No, el problema no sólo está en dar respuesta a esas preguntas. ¿Por qué? Porque Cabañas, como cualquier ciudadano, es libre de dedicar su tiempo libre a lo que le plazca, en el lugar que se le antoje y a la hora que su conciencia y su profesionalismo dicten. Las preguntas están en otro lado. ¿Quién autorizó que un antro como el Bar-Bar permanezca funcionando, en grosera violación a la Ley de Establecimientos Mercantiles, hasta que los clientes lo decidan? ¿Quién permite la venta de bebidas alcohólicas y cigarros, las 24 horas? ¿Quién autoriza que parroquianos —a pesar de que se trata de un club bajo el concepto de socios— acudan portando armas? Ya no se diga quién autoriza las ratoneras de baños, por citar sólo algunos ejemplos. El problema es mayor si recordamos que apenas en 2008 la Asamblea Legislativa aprobó un nuevo reglamento para los antros. Dejar de vender bebidas alcohólicas a las 2:30 de la mañana, y cerrar a las tres. ¿Quién lo respeta? Nadie. ¿Por qué? Por corrupción. Viene a cuento el asunto, porque existe una relación de causa y efecto entre la venta de bebidas alcohólicas las 24 horas del día en antros como el Bar-Bar, la violación de la Ley de Establecimientos Mercantiles, y la recurrencia de tragedias entre jóvenes y profesionistas de distintos gremios, como el de los futbolistas. Aclaramos; el problema del desmedido consumo de alcohol y el gusto por la fiesta interminable, no es exclusivo de los futbolistas y menos de personas públicas, sino que es un problema que anida en todos los estratos sociales, gremios, edades y no respeta género. Lo que es responsabilidad de todos, sin embargo, es el derecho a exigir que la autoridad endurezca el respeto a las leyes que regulan los horarios de antros y la venta de alcohol, y que exista consonancia entre las políticas públicas para contener ese problema. Temas Salvador Cabañas Rotonda Itinerario político Lee También Sociales: Las Rosas de Oro 2024 Los enjambres por combatir ¿Y el dinero para la Línea 4? Frente Cívico Nacional busca ser partido político; se registrará en esta fecha Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones