''Amo a México, amo a los mexicanos'': Florence Cassez

PARÍS, FRANCIA (24/ENE2013).- "Amo a México", declaró Florence Cassez en una  entrevista otorgada el jueves a la AFP pocas horas después de su llegada a  Francia, afirmando que distingue entre el pueblo mexicano y el "puñado de  gente" que estaba contra ella, al día siguiente de su liberación tras pasar  siete años encarcelada en ese país.

Cassez, de 38 años, fue liberada el miércoles por decisión de la Corte  Suprema de ese país, que dejó sin efecto una sentencia a 60 años de cárcel por  secuestros, por considerar que sus derechos fundamentales no fueron respetados  en el momento de su detención.
 
¿Debe usted todavía demostrar su inocencia?
"Si es necesario hacerlo, lo haré. Si hay que seguir. Si hay que seguir  batiéndose para dejar claro en la mente de la gente que soy inocente, por  supuesto que seré la primera en hacerlo y a consagrarme a ello. Pero creo que  la justicia pone en libertad a la gente inocente".

¿Cómo fue la despedida de sus codetenidas al salir de prisión?
"Todo fue muy rápido. No me dejaron la posibilidad de decirles adiós. Sé  cómo contactarlas escribiendo, como me escribieron a mí durante años. Pienso  también también en todos mis amigos mexicanos, en todas las personas que me  apoyaron. Pienso en los activistas sociales, en exministros...Sé que estaré en  contacto con ellos muy pronto (...) He dejado allí grandes amistades. Es por  eso que no pongo punto final a la página, porque he dejado allí muchos amigos".
 
¿Guarda rencor a las autoridades mexicanas?
"No, porque sé distinguir. Contra mí había solamente un pequeño grupo de  personas, que lamentablemente tuvieron el poder durante seis años, y el poder  al más alto nivel. Ahora el gobierno ha cambiado (...) Distingo claramente  entre el pueblo mexicano que he conocido, que me ha apoyado, y el puñado de  gente que estaba contra mí y que tramó todo.
Yo amo a México, amo a los mexicanos. Sólo tengo amor en el corazón, ningún  odio".
 
¿Va a emprender un combate contra la injusticia?
"Hace siete años que estoy en ese combate, que trato a través de mi  batalla, de mi tenacidad, de demostrar que '¡sí, es posible!'. Hablo de mi vida  cotidiana: creo que he dejado algo a todas las detenidas que he conocido  durante años y que me han visto batirme. Los mexicanos se han habituado a este  tipo de injusticias, y esto les deja un mensaje: que no hay que creer nunca que  algo es imposible. Hay que tener esperanza. Eso es lo más importante para mí  hoy. Mañana no sé qué voy a hacer".
 
¿Qué piensa de la polémica sobre los papeles desempeñados  respectivamente por el expresidente Nicolas Sarkozy y el presidente François  Hollande?
"Nicolas Sarkozy fue presidente mucho más tiempo. Tuvo un papel muy  importante. Empezó a tomar posición firmemente junto a mis padres. Para mí, no  hay polémica. François Hollande tomó el relevo de manera diferente y  formidable. Les debo muchísimo a los dos.
Yo me sitúo del lado humano. Cuando se está en tal situación no se hace  política, se está en la superviviencia, en lo humano, en la urgencia. Hoy sólo  tengo gracias que dar a todos".

¿Va a seguir pintando?
"Sí. La pintura ha sido una válvula de escape; pero mi salvavidas fue el  apoyo de los franceses, el apoyo de dos presidentes sucesivos Nicolas Sarkozy,  François Hollande, el apoyo de la embajada de Francia en México con su trabajo  magnífico y su presencia humana a mi lado (...). Y también igualmente el apoyo  de los mexicanos, es importante para mí recalcar esto hoy.