Alerta financiera para Jalisco

Las finanzas públicas de Jalisco y algunos municipios se deterioran. La evaluadora de riesgo Standard and Poor’s retiró la calificación de los municipios de Tonalá, Tlaquepaque, Puerto Vallarta y del Estado de Jalisco luego de haberles rebajado la calificación por haber encontrado inconsistencias en
la difusión de información financiera y por la vulnerabilidad de sus haciendas públicas.

Este hecho significa una señal de alarma porque indica que el endeudarse alegremente bajo el supuesto que paguen los que siguen, debe llegar a su fin.

De acuerdo con información difundida Tonalá y Tlaquepaque no entregaron información oportuna para realizar una adecuada vigilancia de la calificación de los ayuntamientos, lo que supone incumplimiento de compromisos de transparencia.

Pero lo más grave está en que también al Gobierno del Estado de Jalisco se le retiró la calificación.

Con una explicación contundente: hubo “un cambio agresivo en su gestión financiera al abusar del endeudamiento”.

La deuda estatal de Jalisco al mes de septiembre del año pasado tenía ya comprometido 73.6% de sus participaciones federales, según estadísticas de la Secretaría de Hacienda y se seguían planteando planes para contratar créditos.

 Una muestra del desorden en el que se manejan los recursos públicos está en el Congreso del Estado en donde en un hecho de irresponsabilidad se ha crecido el gasto corriente al grado que se han agotado los recursos presupuestados y a partir del segundo semestre no habría dinero para pagar ¡ni la nómina!

Las calificaciones al riesgo crediticio son necesarias para que los estados negocien en condiciones favorables un mayor acceso a financiamiento, ya sea bancario o en el mercado.

 Y en el caso de nuestra entidad a partir de ahora será más caro y difícil obtener empréstitos.

Los ayuntamientos de Tonalá, Tlaquepaque y Puerto Vallarta se encuentran cerca de una situación crítica, y no lejos de ellos está Guadalajara y Zapopan.

Este es un tema de la mayor importancia en la agenda de los asuntos públicos. Es un tema estructural que debe debatirse con responsabilidad.

 Es hora de que las autoridades estatales y municipales expliquen por qué se ha llegado a este punto, mientras que en otras entidades y municipios pasa lo contrario, como los estados de Querétaro, Aguascalientes, Guanajuato, Coahuila y Tamaulipas que fueron calificados con evaluaciones de “muy alta calidad crediticia” Mientras que los estados de Puebla, Campeche, Nuevo León, Zacatecas, Sonora, Hidalgo, Chiapas, Sinaloa, Oaxaca, Estado de México y Tlaxcala fueron evaluados como de “alta calidad crediticia”.

 Y mientras en al ámbito municipal aquí descendimos los Ayuntamientos de Navojoa, Solidaridad (Playa del Carmen), Saltillo, Hermosillo y Oaxaca ascendieron en su calificación.

Jalisco y sus principales municipios se encaminan a un freno en las inversiones públicas o a un incremento de impuestos si actúan con responsabilidad, o a una política de eludir el asunto y dejar una bomba de tiempo para los próximos años.