2009, el peor para prensa mexicana: ONG

CIUDAD DE MÉXICO.- El 2009 ha sido el peor de los últimos diez años para la prensa mexicana, con trece asesinatos de periodistas que siguen sin resolverse, afirmó hoy el presidente de la Fundación para la Libertad de Expresión ( Fundalex), Armando Prida Huerta.

En una evaluación sobre la actividad en el presente año, el dirigente de este organismo civil pidió al Estado mexicano y a la sociedad en general no bajar la guardia y defender el derecho a la libre expresión y el derecho de la sociedad a estar informada, así como a garantizar la seguridad del trabajo periodístico.

Según los datos de Fundalex, de 2000 a 2009 se registraron 59 homicidios de periodistas en el país, y los años con las mayores cifras de trabajadores de la prensa asesinados fueron 2006, con 10; 2008, con 12; y 2009, con 13.

"Si no tenemos la posibilidad de decir lo que debemos decir con respeto a los demás, no tenemos absolutamente nada. Para defender cualquier derecho el individuo se debe expresar, por eso decimos que la esencia de todas las libertades es la libertad de expresión", aseguró Prida.

Aunque el año aún no ha terminado, el dirigente de Fundalex expresó su confianza que no se registre ningún nuevo hecho de violencia contra periodistas en la última semana de 2009.

Afirmó que para lograr construir la democracia en México se requiere "de mayor transparencia, del libre acceso a la información y de toda la libertad para decir la verdad."

Prida convocó a todas las organizaciones sociales, sindicales y políticas para lograr acuerdos en defensa del ejercicio periodístico y para que cesen las agresiones a los periodistas y a los centros de trabajo, así como para que se frenen las presiones económicas contra los medios o sus propietarios.

Agregó que la Fundalex buscará trabajar en coordinación con la Procuraduría General de la República ( PGR), en especial con la fiscalía especializada en delitos contra periodistas, así como con la Secretaría de la Función Pública para dar seguimiento a las recomendaciones de la Comisión de Derechos Humanos.

También promoverá que los legisladores impulsen leyes para garantizar la protección del ejercicio periodístico.