Zapopan se olvidó del Consejo Ciudadano de Transparencia

ZAPOPAN, JALISCO (29/AGO/2012).- “Zapopan no es un ayuntamiento transparente”, afirma Harold Dutton. Él es uno de los pocos ciudadanos que puede señalar la opacidad en la ex Villa Maicera, ya que durante tres años —entre 2008 y 2011— presidió el Consejo Ciudadano de Transparencia del municipio. Con su salida, cuando concluyó su periodo, desapareció el consejo y, desde hace más de un año, Zapopan no tiene un grupo de ciudadanos que sugieran acciones para mejorar la rendición de cuentas. “Hubo cinco convocatorias, y al final sí hubo suficiente gente, incluso se hizo un listado, y aún no hay un consejo”, dijo el también profesor del Departamento de Políticas Públicas de la Universidad de Guadalajara (UdeG).

Dutton señaló que Zapopan se ha orientado a responder muchas solicitudes de transparencia, como lo demuestran los datos —que los sujetos obligados reportan al Instituto de Transparencia e Información Pública del Estado de Jalisco (Itei)— de Solicitudes de Información Pública Respondidas en Jalisco (Sires). Ahí se detalla que en esta administración la ex Villa Maicera respondió 11 mil 278 solicitudes de información, mientras que Guadalajara llegó a ocho mil 240.

Pero “eso no es ser transparente”, advierte. “Dar respuesta una solicitud no es ser transparente, eso es un mero trámite. Es un problema, y no sólo de Zapopan sino de otros ayuntamientos, que creen que son transparentes por darle respuesta a las solicitudes de transparencia”.

Los valores en transparencia que Zapopan debería cumplir están establecidos en la ley y destacan “la máxima revelación, la facilidad de acceso a la información y con la pertinencia”.

Dutton explica que los ayuntamientos creen que cumplen con colocar datos en sus portales de internet, pero la información de los sitios no está actualizada ni completa. Es necesario que los municipios presenten sus procesos de adquisición, cómo ejercen los recursos: “Ellos pueden poner la forma, cómo lo llevan a cabo, pero, si el ciudadano común no lo entiende, entonces no es pertinente”.

SUS PROPIAS CIFRAS DE SOLICITUDES DE INFORMACIÓN LO COLOCAN MEJOR QUE GUADALAJARA

El municipio defiende ejercicio “limpio” y niega opacidad

Pese a los señalamientos de opacidad contra el Ayuntamiento de Zapopan, el municipio se defiende, en total contraste, como una localidad que ha implementado estrategias con resultados favorables.

Y no sólo eso. De acuerdo con la secretaria general de Zapopan, Patricia Godínez, la efectividad en solicitudes de transparencia resueltas en tiempo y forma es tal que el único pendiente a heredar será informar oportunamente a la ciudadanía sobre qué sí es posible solicitar por esta vía: “Estamos trabajando; lo que falta es información al ciudadano de qué sí puede obtener por medio de transparencia, porque la información que se tiene es que cualquier asunto es susceptible de pedirse, y esto no es así: hay información reservada o confidencial”.

Refiere que en Zapopan hay un porcentaje de cumplimiento de 98% en este tenor. Y aclara que la Unidad de Transparencia de ese municipio opera con un director y 12 personas supeditadas. Además, cada área de gobierno tiene un enlace con esa unidad, para optimizar la entrega de información.

Además de las solicitudes ante el Instituto de Transparencia (Itei) existe otro mecanismo para medir las respuestas a ciudadanos: las estadísticas de Solicitudes de Información Pública Respondidas en Jalisco (Sires). Para el caso de Zapopan, presentan algunas desventajas en comparación con el primer método: primero, sólo llegan hasta marzo de 2012; luego, se trata no de cifras del Instituto estatal, sino de las que el Ayuntamiento decide reportar al Itei.

A partir de esta fuente, Zapopan afirma que responde a más solicitudes de transparencia que Guadalajara: 76% de respuestas favorables al solicitante, contra 38% del municipio tapatío. Sin embargo, ante el Itei este municipio recibe mayores recursos de revisión por parte de los ciudadanos.

El presidente del capítulo Jalisco de la Amedi, Juan Larrosa, advierte de esta estadística: “Las numeralias pueden llegar a ser muy engañosas: a lo mejor tienes 100 solicitudes y 99 son de información que es importante, pero no llega a ser comprometedora; en cambio, si una petición genera un proceso de corrupción o de impunidad por no haberla entregado, aunque tengas 99% del cumplimiento, tu práctica está siendo perniciosa”.

ESTADÍSTICAS DE SIRES
Solicitudes respondidas

                    Total       Sí     No      Otras*

Zapopan      11,278   76%    18%    6%
Guadalajara  8,248    38%   31%    31%

*solicitudes que están en proceso o fueron sobreseídas


VOCES
El estilo fue “presionar por omisión” y “cansar a reporteros y ediles”: PAN

El estilo de gobernar de Héctor Vielma fue presionar por omisión, según el regidor panista Héctor Morán, quien dice que fue un trienio de opacidad, con presiones “del salinismo, de la parte más autoritaria del PRI” y en donde el alcalde negó información a conveniencia. Por ejemplo, citaba a sesión los viernes por la tarde pero llegaba dos horas después, y solía “cansar a los reporteros y a los regidores: los puntos que consideraba importantes los comentaba en entrevistas, para que se fueran temprano, pero los que de veras se debían discutir los ponía al final”. Por eso hubo sesiones que terminaron de madrugada y en las que los regidores terminaron aprobando asuntos “por cansancio”.

Lamenta que perdieran el sistema Admin, que servía para “saber dónde se gastaba el recurso y cómo iban las obras. Eso nos lo quitaron”.

La administración de Héctor Vielma es una de las más opacas del trienio. No sólo se ocultó información exigida por la ley, sino que durante las campañas vivió en carne propia las presiones mediáticas: “A nosotros nos vetó. Alguien que utiliza su canal de televisión para hacer política, pues, simplemente, es lamentable”. Esto lo afirmó el primer presidente del Instituto de Transparencia e Información Pública de Jalisco y hoy regidor electo de Zapopan, Augusto Valencia.

El ex funcionario del Itei cuenta que, “en cuanto a los trámites de solicitudes, no hubo grandes sobresaltos, pero, en cuanto a la información fundamental que debía publicar, tuvo serias deficiencias. Hay información que hoy en día es imposible revisar. No hay indicadores de gestión, la nómina es confusa, no sabemos cuánta gente trabaja en el ayuntamiento. Es lamentable porque no hay información básica para hacer análisis… es más, ni siquiera los reglamentos que están vigentes”.

Lamenta que el Ayuntamiento haya dejado en el abandono al Consejo Ciudadano de Transparencia: “Zapopan dejó un pendiente, pero que es un problema que viene de la primera ley. Los consejos nacen antes de que hubiera Itei y los municipios no hicieron ajustes a los reglamentos. Vielma no actualizó el consejo y éste se entrampó en el nombramiento de los consejeros, que eran cuotas de poder”.

Valencia cree que un Consejo Ciudadano como el que actualmente existe, pero no opera, no tiene razón de ser si sus resoluciones no son vinculatorias, y “el alcalde nunca tuvo interés de que se desarrollara este consejo”. Recomienda que se reestructure la manera de operar para que haya una verdadera participación ciudadana.

Sobre el estilo de gobernar, Augusto Valencia es contundente: “Qué se puede esperar de una persona que cita a sesionar a sus regidores en la madrugada; eso es síntoma de que algo oculta”. Además, comenta que en las campañas “él tuvo control en el canal de su familia, y vetó a los contrincantes”.

Y concluye: “Vielma se quiso empoderar, quiso apropiarse sel municipio. Pensó que gobernar era como dirigir una empresa”, y así es como llama a conciliar con el próximo alcalde, Héctor Robles Peiro: “Creo que una de las primeras acciones (de Robles) tendrá que ser deslindarse de Vielma; de lo contrario, vamos a avanzar muy poco”.