Zapopan reconoce no tener recursos para celda cuatro de Picachos

ZAPOPAN, JALISCO (21/JUN/2010).- Se necesitan 150 millones de pesos para la construcción de la celda cuatro de Picachos, mismos que de no conseguirse, podrían ocasionar el cierre del vertedero, pues invertir en mejoras al basurero para evitar contaminación ambiental, fue un requisito que pidieron tanto la Semades como la Proepa al municipio, informó el director de Ecología del Ayuntamiento de Zapopan, Miguel Prado.

La temporada de lluvia se pronostica más intensa que el año pasado, y en el vertedero de Picachos de Zapopan se encuentran en incertidumbre porque no hay recursos para la construcción de la celda número cuatro, la cual es de vital importancia para contener los lixiviados.

Miguel Prado dijo que “hasta el momento hemos tenido un control, ojalá sigamos así, tenemos un plan b, tenemos ocho lagunas vacías por aquello de que lleguemos a tener una contingencia, que los lixiviados no se vayan al arroyo”.

Asimismo comentó que desde hace 15 días, el Ayuntamiento cuenta con la licencia para la construcción de la celda cuatro, pero que “sólo estamos esperando que el presidente (del municipio, Héctor Vielma) dé la orden de inicio de obra, el problema es que se hagan llegar los recursos”.

Reconoció que de los 150 millones aún no se tiene nada; sin embargo indicó que se buscarán en instancias estatales y federales, “se van a tocar todas las puertas, porque es mucho dinero”. Además, aseguró que este proyecto debió de quedar concretado desde la pasada administración “no es que hayamos iniciado proyectos al azar, se supone que esto ya debió de haber estado”.

El titular de la Dirección de Ecología, dijo que se pretende tener en operación la celda cuatro en diciembre del presente año, la cual tendrá una vida útil de aproximadamente cuatro años.

Cabe mencionar que a mediados de mayo pasado, cuando se anunció la conclusión de la construcción de la celda emergente en el vertedero, el funcionario municipal había hecho hincapié en el poco tiempo que se tiene para realizar la construcción de la celda cuatro, pues, había dicho, depende de la vida que tiene la celda emergente.

“Si no terminamos a tiempo, nos obligaría a tirar en un relleno particular, y entonces las mil 300 toneladas nos costarían aproximadamente 12 millones de pesos al mes”.

EL INFORMADOR / LILIANA NAVARRO