GUADALAJARA, JALISCO (11/JUL/2017).- Después de al menos 12 incidentes con violencia en que taxistas de Puerto Vallarta y choferes de Uber se han visto involucrados, el alcalde Arturo Dávalos Peña, anunció que desde ayer se arrancó con un operativo de seguridad para evitar que la plataforma opere sin permiso.La empresa logró ampararse contra la Ley de Movilidad del Estado, por lo que la Semov no puede impedir que la plataforma siga activa en Zona Metropolitana.Sin embargo, Puerto Vallarta cuenta con su propio sistema de movilidad, por lo que sí puede prohibir que Uber otorgue servicios en el centro turístico."Si Uber no tiene autorización para funcionar en Puerto Vallarta, no vamos a permitir que estén operando ahí... mientras no cumplan con todos los requisitos que pide la Secretaría de Movilidad (Semov), no pueden operar en ciudades medias, como es el caso de Puerto Vallarta".Uber entró a Puerto Vallarta el pasado 27 de junio, y la inconformidad de los taxistas tradicionales no se hizo esperar, pues el servicio de transporte privado no tiene autorización para operar en el Puerto.El gobierno municipal ha impuesto infracciones a coches de Uber, aunque para ello se requiere encontrar a los choferes en flagrancia, es decir, llegar cuando el usuario sube al coche y se demuestra que se trata de un servicio de la plataforma, lo cual no es tan sencillo, advierte el munícipe, pues los automóviles traen placas de distintos estados y no hay un registro.Las madrugadas del sábado y domingo pasados se tuvieron seis incidentes entre choferes de taxis tradicionales y choferes de Uber, en donde también salieron afectados los usuarios que solicitaron el servicio de la plataforma, según se observa en videos que circulan en las redes sociales."Yo le pedí a nuestro director de Seguridad Pública y al director de Tránsito municipal, que actúen siempre conforme a derecho y conforme a nuestro reglamento".Dávalos Peña mencionó que los taxistas crearon su propio "operativo", que consiste en bajar a los turistas de los coches de Uber y subirlos a sus automóviles, para después llevarlos sin cobro a su destino. Esto no ha sido bien visto por los usuarios de Uber, pues argumentan que cada persona tiene derecho a elegir el transporte que más le convenga.Señaló que la confrontación se ha dado también de parte de choferes de Uber hacia los taxistas."Somos un destino turístico y cualquier hecho de violencia o confrontación de este tipo nos pega; los restauranteros y comerciantes se reunieron con taxistas junto con tu servidor, de que no queríamos escándalos, que cuidáramos el destino turístico, que había una tregua hasta el 17 de julio, cuando la autoridad federal va a determinar si procede o no procede lo que solicita Uber". EL INFORMADOR / Thamara Villaseñor