Tonalá oculta deuda millonaria

TONALÁ, JALISCO (29/JUL/2013).- La Tesorería de Tonalá informó en abril pasado sobre la existencia de pasivos por 766.8 millones de pesos con la Comisión Federal de Electricidad y los bancos Interacciones y HSBC, pero el mismo alcalde Jorge Arana contradice esos números y, a la vez, rinde cuentas de forma parcial.

El munícipe contradice a la Tesorería y afirma que las deudas totales son por mil 038 millones. Sin embargo, no incluye los 215.7 millones de pesos que le adeudan al Instituto de Pensiones del Estado.

—¿Por qué oculta información la Tesorería?

—Tengo que estar seguro de que verdaderamente se les debe (a constructores o proveedores, por ejemplo). Muchas de estas deudas (heredadas) no había necesidad de pagarlas porque eran situaciones no muy claras… y no voy a publicar algo que no está comprobado.

—¿Y por qué usted omite las deudas millonarias con Pensiones?

—No se le debe porque hay un fideicomiso que está garantizado y respaldado con 45 terrenos (municipales, que serán vendidos y el recurso obtenido se dirigirá al Instituto para saldar  pendientes).

El 23 de enero pasado, el Ayuntamiento aprobó un convenio para crear dicho fideicomiso. En ese entonces se consideraron 42 predios municipales, que serían vendidos para el pago del pasivo acumulado con Pensiones por 193.3 millones de pesos. Pero el último informe del Instituto (8 de julio) subraya que el estatus de la deuda de Tonalá se ubica sin convenio y en un proceso judicial, por lo que los pasivos ya aumentaron a 215.7 millones de pesos.

La deuda con Pensiones se arrastra desde 2009 y representa el acumulado de las cuotas patronales (en este caso es el Ayuntamiento) y las aportaciones de trabajadores que la misma autoridad municipal ha evadido depositar de forma sistemática a la cuenta del Instituto. A los mil 038 millones que reconoce el alcalde hay que sumarle esos 215.7 millones de pesos que deben a Pensiones. Por su parte, la Tesorería niega la lista total de adeudos y violenta la Ley de Información.

En Tonalá, la deuda total y el pago de la nómina mantienen asfixiada a la administración y en detrimento del mejoramiento de los servicios públicos básicos. Mientras, el tesorero Jorge González Pérez negocia la reestructuración de los pasivos con instituciones bancarias (764.8 millones de pesos hasta abril pasado) y el alcalde no descarta que sea por un monto superior al que se le deben a los bancos. “Eso depende del planteamiento que nos hagan. Yo se lo haré saber a los regidores para tomar decisiones”.