Suspenden apoyos para vivienda por veda electoral

GUADALAJARA, JALISCO (05/MAY/2015).- En la Colonia Nuevo Israel, al filo de uno de los acantilados de la Barranca de Huentitán, la presidenta de colonos, Consuelo Alba Olivares, reconoce que necesitan urgentemente ayuda. La mayoría de las 300 casas en la localidad están cubiertas con láminas, madera y cobijas.

Muchos no han podido acceder a programas de mejoramiento de vivienda, como Claudia Cano, una madre soltera muda, quien necesita a su mamá para poder explicarse. Claudia fue seleccionada para tener un baño y un techo firme; sin embargo, como su casa está hecha de lámina y cobijas, no tenía cimientos para sostener las tejas, por lo que sólo le instalaron el baño.

Las más de 26 mil casas con piso de tierra o con un sólo cuarto, respectivamente, y las ocho mil viviendas sin baño en la metrópoli deberán esperar la aplicación de este tipo de programas debido a la suspensión de los mismos por el periodo electoral.

La Secretaría de Desarrollo Social, a nivel federal, anunció que a partir del 23 de abril se suspendería la entrega de beneficios sociales para respetar el blindaje electoral. La veda concluirá hasta el 7 de junio. Así lo confirma Germán Pérez de Celis, secretario de Desarrollo Social en el Ayuntamiento tapatío: “Por los períodos electorales no hemos recibido (el recurso)”.

El presupuesto corresponde al Programa para el Desarrollo de Zonas Prioritarias. Sin embargo, el dinero procedente para este mismo fin del Fondo de Aportación para la Infraestructura Social Municipal (del Ramo 33) seguirá aplicándose a pesar del blindaje: “Como es un fondo federal, lo debemos ejecutar y gastar donde la Federación audite y comprobarlo el año correspondiente cuando se hace el depósito”.

El Ayuntamiento ha tenido una inversión de 97.9 millones de pesos procedentes de la Federación para mejorar las viviendas en zonas con algún grado de vulnerabilidad. Sólo en 2014 se intervinieron casas en 26 colonias con nuevos cuartos para baño, dormitorio y cocina, además de pisos, muros y techos firmes.

Mariana Castro es habitante de Lomas del Paraíso, una de las colonias beneficiadas. Asegura que ningún encargado ni trabajador de las obras ha promovido el voto: “El voto es libre y secreto, pero no dicen que votes por algún partido en especial”.

En Tonalá tampoco podrán “mover nada”, por la veda electoral, notifica Leonardo Cruz González, encargado del despacho en el Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal: “Del 7 de junio en adelante liberan el recurso y reiniciamos con los programas”.

Jesús Ibarra Cárdenas, académico del ITESO, analiza que con la suspensión temporal de los programas se reconoce el uso discrecional de los recursos, en lugar de reforzar los filtros de revisión.

RECURSOS PROVENIENTES DE LA FEDERACIÓN
Guadalajara, el que más apoya

Leticia Rodríguez celebra la restauración de decenas de casas en la colonia donde vive, Lomas del Paraíso. Veía a los albañiles laborando a diario: “Es mucha gente la que necesitaba servicios públicos en la zona. Ya es mucho con que les tapen un cuarto. Unas sí las terminaron, a otras les falta el tinaco y parte del baño. Pero con la escasez del dinero, imagínate tener un cuarto y un baño nuevo”.

Por ello agradece las obras que, si no fueran por el presupuesto federal, difícilmente se combatiría la vulnerabilidad de la población al interior de sus viviendas. Los ayuntamientos de Guadalajara, Tonalá, Tlaquepaque y Tlajomulco recibieron poco más 116 millones de pesos durante el periodo 2012-2015 para programas de mejoramiento de vivienda, de los cuales la mayoría son de origen federal. En el caso de Zapopan, el Ayuntamiento sólo concedió el dato global de inversión en obra pública.

Tlaquepaque depende completamente de la Federación para obtener recursos, ya que los 3.7 millones de pesos proceden de esta instancia. En Tonalá, 80% del total (11.1 millones) son recursos federales. Y en Tlajomulco, dos terceras parte del dinero total (3.6 millones) también en el mismo comparativo de tiempo.

Particularmente en Guadalajara, el secretario de Desarrollo Social en el Ayuntamiento, Germán Pérez de Celis, reconoce que el Gobierno de la República carga con la mayor responsabilidad presupuestal para mejorar las viviendas de la ciudad: “Cada vez se nos facilita más (el recurso) de la Federación”.

Aunque dice que, al mismo tiempo, se hace más metódica la entrega del dinero con nombre y domicilio del beneficiario para prevenir desvíos. La revisión se plasma en una auditoría permanente de parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

En Tonalá también reportan la importancia del Gobierno federal para este programa. Según Oscar Valdovinos, quien es parte de la oficina del Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal, la Federación aporta hasta 80% del recurso, contra un 10% municipal y el resto estatal.

Pérez de Celis precisa que deben gastarse todo el presupuesto; de lo contrario, al siguiente año les aplican un recorte presupuestal. Fue el caso de Zapopan, que regresó 7.9 millones de pesos a los gobiernos federal y estatal, que debían invertirse en programas para personas en condiciones de pobreza. La explicación, tal como informó esta casa editorial en julio de 2014, fue que llegaron a finales de noviembre y principios de diciembre de 2013, por lo que no hubo tiempo para ejercerse el año anterior.

Recorte no afectará

Ni el recorte por más de 124 mil millones de pesos en el gasto público federal que anunció la Secretaría de Hacienda para este año, ni el ajuste que se espera para el siguiente, afectarán el presupuesto otorgado para el mejoramiento de vivienda, asegura el secretario de Desarrollo Social en el Ayuntamiento de Guadalajara, Germán Pérez de Celis.

“El Ramo 33 (del que se desprende el Fondo de Aportación para la Infraestructura Social Municipal) no se tocó. De hecho, en las reglas de operación de 2014 hay una novedad de que si hay un buen cumplimiento se puede alcanzar una bonificación de recursos para el siguiente año”.

El Fondo está dirigido a combatir los índices de pobreza dentro de las viviendas. Los programas permiten construir un cuarto, muro, baño, piso firme, recamara o bóveda.

PARA SABER
El origen

El Ramo 33 de Aportaciones Federales para Entidades Federativas y Municipios surge de la integración de programas y recursos que anteriormente se ejercían para el sector salud, de las aportaciones para los sistemas de educación básica, normal, tecnológica y de adultos, y desarrollo regional. A partir del Presupuesto de Egresos de 1999 se considera este rubro.

APOYOS PARA MEJORAR VIVIENDAS

Municipio Presupuesto  Casas intervenidas en 2014*
                  para  vivienda (2012-2015)

Guadalajara 97’976,745 758

Tonalá 11’170,000 246

Tlaquepaque 3’781,338 369

Tlajomulco 3’684,893 289

Zapopan No informa 278

Total 116’612,976 1,940

Nota: Zapopan no informó la inversión en el mejoramiento de vivienda en el municipio.

* Los apoyos incluyen piso firme, techo, muro, baño, enjarre, tinaco o cuarto adicional.

Fuente: Ayuntamientos.

TONALÁ
Viven en casas de cartón y madera

Fueron 100 baños y 146 pisos firmes los que se instalaron en Tonalá durante 2014. Para eso alcanzaron los ocho millones de pesos que concedió el Gobierno federal en ese año, en conjunto con el Estado y Ayuntamiento. Pero los apoyos son insuficientes para las carencias de miles de viviendas en mal estado.

A Claudia Cano no le pudieron instalar un techo firme por las dificultades que tiene para acceder a un empleo bien remunerado. Vive sobre la calle Tribu de Judá, en la Colonia Nuevo Israel, o eso dice la cartulina que señala el nombre de la vialidad de tierra y rocas.

Su hija está en el techo de su casa con una escoba en las manos. Pero no juega con ella, su trabajo es barrer las hojas y el polvo del techo de lámina para evitar que caiga por el peso. Claudia, su madre, es muda y le hace señas que ella comprende a la perfección para continuar con el trabajo. Su abuela le dice que limpie bien los rincones porque la esquina de la lámina puede ceder y destrozar las paredes de cartón y madera.

“La Sedesol (Secretaría de Desarrollo Social) iba a apoyarme, pero me pidieron que yo comprara los polines”, lamenta la madre de Claudia, quien trata de compartir la frustración de su hija. El apoyo que le tocaba era un techo firme, pero no podían instalárselo porque no tiene cimientos con cuales sostener la teja y por falta de los mil pesos que cuestan no pudo comprarlos. La historia terminó en que ella sigue con su techo de lámina y paredes de madera y cartón.

“Yo de dónde voy a agarrar dinero si soy una mujer sola. Ella (Claudia) es madre soltera y trabaja en lo que se puede”, dice abuela de la niña que no deja de barrer el techo de lámina.

Lo único que les aportó la Sedesol fue un baño. Ahora lo tienen nuevo, pero no lo han usado porque en toda la colonia no tienen el servicio de agua potable. Mientras, siguen utilizando su baño de toda la vida: un hoyo en la tierra con cobijas sostenidas por palos y ramas alrededor para cubrir el espacio.

Durante el temporal, la casa de Claudia se inunda, y su piso de tierra se hace fangoso, por lo que tienen que irse a dormir con un hermano en la misma colonia: “Me da coraje. Siempre he tenido mala suerte. Sin oportunidades ni nada. Metí papeles y no me quisieron aceptar en varios programas, ya ni meto para eso. Me pego con mi hijo para comer”, dice la señora, explicando el sentir de su hija y su nieta.

Sólo en los cinco municipios más poblados de la Zona Metropolitana de Guadalajara, durante 2014 se otorgaron mil 940 apoyos para viviendas con la construcción de un piso firme, techo, muro, baño, enjarre, tinaco o cuarto adicional. Sin embargo, no es suficiente para abatir el rezago en esta área donde, por ejemplo, hay 26 mil 348 viviendas con piso de tierra, según el dato más reciente de la Sedesol. En todo el Estado, tres de cada 100 viviendas están en estas condiciones (poco más de 54 mil), y dos de cada 100 no tienen baño (42 mil 765 casas).

De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el piso firme disminuye la incidencia de enfermedades parasitarias en 78% entre las familias que residen en viviendas con estas condiciones. La anemia se reduce en 81% y los episodios de diarrea en 49%, principalmente en niños y niñas.

En la colonia Nuevo Israel otros habitantes ya son un poco más afortunados, como Consuelo Alba Olivares, presidenta de colonos, quien cuenta con una casa amplia con techo y baño. Y también está conectada a una toma de agua para tener el recurso.

“Nos falta de todo. Nos acaban de meter la luz, pero falta el drenaje y agua, que es nuestra petición. Vinieron los del SIAPA (Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado) y dijeron que ya están haciendo el plano de cómo sacar el drenaje porque está pesado hacer las obras por la piedra (en el subsuelo)”.

En esta localidad, nacida hace 19 años al filo de la barranca, y detrás de la Colonia Jalisco, hay alrededor de 300 casas, las cuales fueron estudiadas por la Sedesol en julio del año pasado y apenas aplicará su recurso. Desde hace varios años, el Ayuntamiento de Tonalá lleva a cabo obras del Programa de Atención a Zonas Prioritarias, de origen federal.

“Los hermanos (señala a los feligreses de La Luz del Mundo) hicieron columnas para que resistan las tejas; donde hay puras lonas no pudieron instalarlas”.

Condiciones de la vivienda en Jalisco

Habitadas Con piso de tierra Sin excusado o sanitario Con un solo cuarto

Jalisco 1’802,424 54,476 (3%) 42,765 (2.4%) 60,088 (3.3%)

Guadalajara 370,656 5,373 (1.4%) 1,974 (0.5%) 5,910 (1.6%)

Zapopan 311,046 8,649 (2.8%) 2,683 (0.9%) 8,871 (2.9%)

Tlaquepaque 141,521 5,715 (4%) 1,437 (1%) 4,838 (3.4%)

Tonalá 104,756 4,157 (4%) 1,225 (1.2%) 4,159 (4%)

Tlajomulco 101,811 2,454 (2.4) 891 (0.9%) 3,187 (3.1%)

Fuente: Sedesol-Coneval.

Selección de beneficiarios

Los hogares pobres que se benefician con el programa se determinan en función de las brechas existentes para cinco necesidades:

Ingreso per cápita del hogar.

Nivel educativo promedio por hogar.

Disponibilidad de espacio de la vivienda.

Disponibilidad de drenaje.

Disponibilidad de electricidad o combustible para cocinar.

ZONAS MARGINADAS
Dos años para un techo nuevo

Desde 2013 iniciaron los trabajos de recolección de información para intervenir y mejorar las viviendas, comparte Leonardo Cruz González, encargado de despacho del Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal en Tonalá.

Explica que en ese año se levantó un cuestionario socioeconómico en distintas colonias para decidir cuáles serían beneficiadas. Posteriormente la Universidad de Guadalajara intervino para fijar un padrón de beneficiarios: “Nos corresponde a nosotros revalidar, porque hay casos donde la gente deja su casa y debemos ver que ese padrón siga vigente. Y luego distribuimos los apoyos entre las colonias”, dice Cruz González.

La titular de la Sedesol a nivel federal, Rosario Robles, emitió hace dos semanas una circular donde se indican los criterios para evitar que los servidores de la institución participen en actividades partidistas o hagan mal uso del recurso ante el proceso electoral del 7 de junio próximo (disponible aquí http://is.gd/ERThx5).

LA VOZ DEL EXPERTO
Absurdo, freno de recursos por campañas electorales

Jesús Ibarra Cárdenas (investigador del ITESO).

Con el freno a la distribución de los programas sociales, por lo menos el de mejoramiento de la vivienda por parte de la Secretaría de Desarrollo Social, se reconoce la utilización del dinero público para partidos políticos, comenta Jesús Ibarra Cárdenas, profesor e investigador del Departamento de Estudios Sociopolíticos y Jurídicos.

Esto “es un absurdo, aunque tenga el fin de conservar la equidad en la contienda: Hay relaciones clientelares con esos recursos y la única opción que encuentran las autoridades es prohibir su distribución y con eso afectamos a quienes lo necesitan”.

Diagnostica que el verdadero problema está en la legislación, que no maneja controles estrictos para establecer un contrapeso a esas irregularidades, pero tampoco existe transparencia en la entrega de los recursos.

Comenta que se tiene un avance en el combate de las anomalías con las facultades que se le dio a la Auditoría Superior de la Federación, que podrá revisar el uso de recursos públicos en el momento en que se ejercen y emitir las sanciones: “Pero no es suficiente, se debe dar al ente fiscalizador mejores herramientas”.

Agrega que, a largo plazo, se daría transparencia a las políticas sociales y una estrategia para que su administración no se sujete a criterios políticos: “Con esto se generan incentivos para que nuestra política social no sea de clientelas sino de desarrollo comunitario, local y social”.

Mientras tanto, en el país se seguirá tratando de resolver el problema del uso de recursos públicos para campañas electorales: “No le queda claro a la gente que recibe el apoyo del programa, que es un derecho suyo y no debe quedar bien con un partido político”.

Agrega que actualmente la fiscalización es mucho después de que se aplica el presupuesto, y sólo se analizan los procedimientos y no los resultados del programa: “El problema central es la discrecionalidad en la distribución de los recursos”.

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