Solucionan desabasto de agua en Puente Grande

GUADALAJARA, JALISCO (08/JUN/2013).- Desde hace años, el complejo penitenciario de Puente Grande recibía únicamente 40% del agua potable requerida para abastecer a su población. Pese a ello, ni internos ni funcionarios alegaban problemas al interior de ese centro de reinserción social por desabasto. Aseguraban que el líquido por el que tienen que “hacer cola” los internos todas las mañanas era suficiente, y de una calidad óptima.

Pero el desabasto ya comenzaba a registrar problemas. De acuerdo con el fiscal general del Estado, Luis Carlos Nájera, sí se han registrado algunos altercados por el acceso al agua potable entre la población de internos.

Pero para acabar con ello, la Fiscalía General del Estado y el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) se coordinaron para construir una nueva línea de abastecimiento de seis pulgadas, y conectarla a una más, propiedad del organismo metropolitano. Hoy, finalmente el SIAPA distribuye un porcentaje de agua para abastecer a Puente Grande.

De acuerdo con la Comisión Estatal del Agua (CEA), dependencia que invirtió 1.5 millones de pesos en la obra —cuya fecha de arranque fue el pasado 26 de abril—, el caudal adicional será de 35 litros por segundo, lo que beneficiará a las 27 mil personas que, calculan, están en el complejo carcelario tanto por labores administrativas como atravesando un proceso penal.

Marisela Gómez Cobos, fiscal de reclusorios en la Entidad, defendió la cristalización de un proyecto que ella misma pidió hace casi dos décadas, y que “permitirá que llegue agua a todas las celdas”. Atrás quedaron, dijo, los conflictos por agua que se registraban al interior del núcleo de prisiones; peleas que ningún interno reconoció ante medios de comunicación.

“Naturalmente que esta obra viene a solucionarnos el problema del agua (...) A mí hace 18 años (en su primer periodo como directora de Puente Grande) me tocó pedir esta obra, y por un motivo u otro no se había podido hacer”.

Calificó como “un sueño” el contar con agua suficiente, toda vez que hasta los juzgados carecían de ella. Y respecto a los internos, concluyó que es “difícil verlos formados a las dos, tres, cuatro de la tarde cargando sus cubetas, porque no alcanza a caer (agua) en las llaves”.

El nuevo ducto permitirá acercar más agua, a más lugares: todos los reclusorios estatales, el complejo de máxima seguridad (de orden federal), los juzgados comunes y federales, las tiendas, torres de paso e incluso a espacios verdes.  

• Penal metropolitano aún no tiene fecha para operar

Aunque fue inaugurado a poco de que terminara el periodo gubernamental de Emilio González Márquez, el penal metropolitano sigue sin cambio alguno; es decir, con tecnología de punta y nadie en su interior, lo que impide el desahogo del resto de los centros carcelarios que están en el complejo de Puente Grande.

Y la fecha para que esto ocurra hasta el momento es incierta. Las autoridades de reinserción social esperan a que los custodios se practiquen las pruebas de control y confianza (y que las aprueben) para comenzar a considerar perfiles del personal que recién se incorporará.

Marisela Gómez Cobos, directora de penales en el Estado, expone que las pruebas podrían concluir antes de noviembre próximo.