Sin localizar, ex presidente de la FEG

TONALÁ, JALISCO (21/DIC/2011).- El Ayuntamiento de Tonalá desconoce el paradero del regidor de Tonalá Mayo Ramírez, también ex presidente de la Federación de Estudiantes de Guadalajara ( FEG).

Consultado al respecto, el alcalde de ese municipio, Antonio Mateos, dijo desconocer en dónde se encuentra el funcionario, ya que en su oficina ni por teléfono se le ha podido localizar.

El edil está ilocalizable luego de que se dio a conocer la semana pasada la aparición en instalaciones de la FEG de los cuerpos de cuatro estudiantes de la Universidad de Guadalajara (UdeG) y del padre de uno de ellos.

"De él no sé nada. A mí me preocupa, como me preocupa la situación personal de todos los regidores. Esas son cuestiones extras del municipio, eso lo tendrán que investigar o buscar otras instancias", señaló el presidente municipal de Tonalá.

Agregó que Mayo Ramírez solicitó un permiso para no estar presente en la pasada sesión solemne. Negó haberlo visto en los últimos días en su oficina, pero dijo que el personal continúa trabajando.

Hasta el momento no ha podido establecer comunicación con él para aclarar las dudas que han surgido respecto a sus labores en el ayuntamiento y en la FEG.

Mateos no pudo afirmar si el regidor cuenta con una plaza como profesor o director en alguna escuela secundaria de la ciudad. "A mí no me consta", respondió.

El ex presidente fegista es considerado "líder moral" de la organización estudiantil. El regidor tonalteca es hijo de Álvaro Ramírez Ladewig, quien a finales de la década de los 80 rompió políticamente con el entonces rector de la UdeG, Raúl Padilla López.

El edil tonalteca es sobrino de quien fuera jefe político de la UdeG, Carlos Ramírez Ladewig, asesinado en la década de los 70.

Este medio informativo ha intentado en reiteradas ocasiones comunicarse vía celular con Mayo Ramírez, pero al marcar a su número telefónico no da tono y sólo se escucha el mensaje "el número que usted marcó es probable que se encuentre apagado o no lo contesten".

EL INFORMADOR / FABIÁN RAMÍREZ