Se va Elisa Ayón; hay más denuncias

GUADALAJARA, JALISCO (13/NOV/2013).- “Yo tengo mi conciencia tranquila”. Así decidió terminar su mensaje de despedida la regidora del PRI en Guadalajara, Elisa Ayón Hernández, en el que anuncia que pide licencia y se aparta del Ayuntamiento tapatío, el mismo día que comerciantes establecidos del primer cuadro confirmaban que les exigió dádivas si querían que la autoridad retirara al ambulantaje.

Investigada por la Fiscalía General de Jalisco a partir de su intromisión en la Dirección de Panteones tapatía (“Agarremos lo que tengamos que agarrar, repártanlo”, dijo ahí), la titular de dos plazas de directora en la Secretaría de Educación Jalisco dice en su comunicado: “La ley y el tiempo lavarán mi nombre”, y “Sé que la justicia me regresará la credibilidad”.

El presidente municipal tapatío, Ramiro Hernández García, hizo público desde el viernes pasado su deseo porque la regidora pidiera licencia, pese a ello, antier Ayón Hernández se decía aún indecisa y recordaba que habían sido los tapatíos quienes votaron por ella; ayer el alcalde, su correligionario priista, se deslindaba de manera tajante de su actuación: “No sé quién sea su patrón, y por eso nosotros lo que hemos resuelto es que sea la Procuraduría la que investigue, que sea la Fiscalía, para que cualquier señalamiento o cualquier hecho pueda aclararse hasta el fondo”.

El alcalde se refería a esta frase de la regidora hacia comerciantes establecidos de Obregón, Javier Mina y Medrano, dentro de su segundo audio revelado —el primero fue en Panteones—, cuando les pidió las dádivas a cambio de activar los operativos contra el ambulantaje: “Para que llegue el dinero por arriba y no por abajo, porque por abajo hay mucho dinero, pero mucho, y no le llega al patrón […] y si ahora le llega al patrón, él tiene que actuar”.

Ex dirigente estatal de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) del PRI, quiso ser la candidata por esos colores en Guadalajara en la pasada elección, y ahora se develaba como aspirante a la gubernatura; los hechos le costaron hasta la Secretaría General del partido en el municipio. “Soy una mujer de instituciones. He crecido y me he desarrollado políticamente en el PRI y hoy he decidido solicitar licencia como regidora del Ayuntamiento de Guadalajara para facilitar las investigaciones que las autoridades están llevando a cabo. Les dejo a las autoridades competentes la labor de demostrar quiénes son en realidad los que merecen las sanciones legales”.