Jalisco | Entre veras y bromas por Jaime García Elías —Santo laico La vida —es decir, la muerte— convirtió a Colosio en émulo de los novios de las leyendas de pueblo Por: EL INFORMADOR 24 de marzo de 2010 - 06:47 hs Un crimen no resuelto —como tantos que hay en México, dicho sea de paso— fácilmente se convierte en novela. Y un candidato que a causa de una zancadilla trágica del destino no deviene gobernante, fácilmente se convierte en mito; es decir, en una mentira que crece. Verbigracia, Luis Donaldo Colosio. —II— A 16 años de la fatalidad de Lomas Taurinas, se antoja pensar que también los asistentes al funesto mitin del efímero candidato priista y fallido —por las circunstancias que constan en actas— Presidente de la República, desde el momento en que cobraron conciencia de la dimensión del suceso, hubieran podido corear, como las multitudes que se reunieron hace cinco años en la Plaza de San Pedro, en ocasión del funeral del Papa Juan Pablo II: “¡Santo súbito!”. La burocracia mexicana, dígase en su agravio cuanto se quiera, es, evidentemente, más eficiente que la vaticana. Para procesos de canonización “fast track”, los nuestros... Prueba al canto: el culto que se rinde al político de Kino, Sonora, en cada aniversario luctuoso. La aseveración de que “su ideario sigue vigente”; la declaración de que el partido del que fue miembro, dirigente y abanderado, acepta su herencia espiritual: “El compromiso de recoger la demanda de justicia, desarrollo y oportunidades de los mexicanos”; de paso, aprovechando que ahora gobiernan otros, la insistencia, rotunda —como dijo un orador en el acto conmemorativo celebrado en Guadalajara—, en que “se ahonde en las investigaciones” y “se conozca a los autores intelectuales del magnicidio”... —III— Falta decir que las herencias espirituales de todos los candidatos a la Presidencia de la República que en este país han sido, siguen vigentes. Como ideales inalcanzables; como buenas intenciones de las que están empedrados tanto las campañas políticas como el camino del infierno —por no decir que como frases demagógicas— pero siguen vigentes: la “Renovación moral de la sociedad” de Miguel de la Madrid; el “Bienestar para la familia” de Ernesto Zedillo, etc. Falta decir que el santo laico festejado ayer, tuvo la fortuna de morir antes de comprobar, en carne propia, que “gobernar desgasta”. Falta decir, en fin, que la vida —es decir, la muerte— convirtió a Colosio en émulo de los novios de las leyendas de pueblo, que perecen trágicamente en vísperas de la boda... y de las viudas vírgenes que, enloquecidas, visten el traje de novia hasta el día en que la bendita muerte les permita consumar su matrimonio. Temas Jaime García Elías Entre veras y bromas Lee También Operación Enjambre, ¿golpe o estrategia? La kriptonita contra Omar… está en casa Operativo Enjambre: estrategia clave de la Presidencia Ataque armado en el antro DBar deja seis muertos Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones