Rutas de transporte público no sufrirán modificaciones

GUADALAJARA, JALISCO.- El secretario de Vialidad, José Manuel Verdín Díaz, aseguró que las rutas de transporte público que circulan por la zona de la Avenida Lázaro Cárdenas no se modificarán por la construcción del Puente Matute Remus, conocido también como Puente Atirantado, cuyas obras inician el próximo lunes 26 de octubre, pero reconoció que habrá afectaciones en la vialidad, por lo que ya están listas las rutas alternas para esta zona.

“Las rutas de transporte no se modifican, aún quedará un sólo carril, que es en una de las etapas donde más se intensificarán los trabajos; ese carril será para el transporte público, porque no hay rutas alternas”.

Por esta construcción, la Secretaría de Vialidad y Transporte (SVyT) ha tomado sus providencias y  ya tiene lista las vías alternas que se deberán tomar durante el tiempo que tarde la obra.

“Los carriles laterales tomarán por Avenida Arboledas, en su dirección de Sur-Norte, hasta Niños Héroes; Niños Héroes será hasta Guadalupe, y en Guadalupe incorporarse nuevamente a Lázaro Cárdenas hacia el Poniente, y también ya están las rutas en el sentido de Oriente-Poniente a Oriente, que sería por San Ignacio, Las Rosas y Tonatzin, para incorporarse a Lázaro Cárdenas”, explicó el funcionario estatal, quien precisó que será el próximo lunes cuando se lleve a cabo el cierre de los carriles, por tal motivo la mayoría de la señalización ya se ha colocado en la zona.

Mientras que el Puente Atirantado provocará modificaciones en la circulación, la construcción del Puente Oriente, en el Fraccionamiento Revolución, que inició ayer, no afectará el tránsito, pues la obra sólo se efectúa en los camellones.

“La obra sólo se está llevando a cabo en los camellones y no hay cierres en el ingreso de la ciudad, por eso no habrá afectaciones”, precisó Verdín Díaz.

Quedarán en la colonia Chapalita

Derribarán 180 árboles, otros tantos serán transplantados

GUADALAJARA, JALISCO.- La construcción del puente atirantado en la Avenida Lázaro Cárdenas, en su cruce con López Mateos, requerirá que sean transplantados 180 árboles de la zona, más una cantidad similar de sujetos forestales que tendrán que ser derribados, informó la Dirección de Ecología de Guadalajara.

Eduardo Catalán Domínguez, titular de la dependencia municipal, aseveró que se encuentran en una comunicación constante no sólo con la Secretaría de Desarrollo Urbano del Estado, responsable de esta obra, sino de los vecinos de la colonia Chapalita, para estar al tanto de sus inquietudes.

“Hemos definido claramente cuál es el arbolado que será removido, cuáles son sujetos de transplante, cuáles de derribo y muy puntualmente definimos criterios de sustitución; creemos que en Guadalajara no habrá una preda importante en lo que es masa forestal”, dijo.

El funcionario refirió que los trabajos de transplante y derribo de árboles serán realizados por una empresa particular al servicio de la Sedeur, por lo que la Dirección de Ecología de Guadalajara sólo fungirá como un supervisor de las acciones para garantizar que se lleven a cabo de una manera correcta, recurriendo a las técnicas adecuadas que favorezcan la supervivencia de los sujetos forestales reubicados.

Esa empresa ya solicitó a la Dirección de Ecología que otorgue permisos para efectuar algunas podas a los árboles seleccionados, pues forma parte de los trabajos de transplante que deberá llevar a cabo.

Asimismo, Catalán Domínguez aseveró que su compromiso es que los 180 árboles que serán transplantados permanezcan en la misma colonia Chapalita, en espacios como pueden ser camellones en vialidades o en las banquetas. Los cálculos del director hablan de una supervivencia de 80 o 90% del arbolado transplantado, pues dijo que se trata, en su mayoría, de árboles jóvenes que pueden sobreponerse al cambio de ubicación.

Lo anterior contrasta por la cifra proporcionada por la titular de la Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades), quien había afirmado que se tenían identificados en la zona de Lázaro Cárdenas 567 árboles que resultarían afectados con las obras, de los cuales 189 eran susceptibles de trasplante y 378 de derribo.

Telón de fondo

El puente atirantado está proyectado para realizarse con una inversión de 350 millones de pesos por parte del Gobierno del Estado de Jalisco, y fue diseñado con una estructura que tendrá una longitud de 930 metros.

El inicio de su construcción se viene anunciando desde el mes de febrero, pero se ha venido retrasando, ahora la fecha definida por la dependencia estatal es el 26 de octubre.  Esta obra, que llevará por nombre Puente Matute Remus, necesitará entre 12 y 14 meses de ejecución, por lo que deberá estar terminada para finales del año 2010, conforme a la información oficial.

Contribuye a la contaminación ambiental

Obra pública privilegia a usuarios de automóvil: especialista

GUADALAJARA, JALISCO.- Mientras en otros países o regiones del mundo aprovechan la crisis para plantear estrategias de consumo, en México no se ha sabido plantear una estrategia razonable, lo cual no ha permitido la disminución de los índices de contaminación, debido a la dependencia que tiene la economía nacional por el petróleo.

Así lo informó Arturo Curiel Ballesteros, investigador del Instituto Medio Ambiental y Comunidades Humanas del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), quien explicó que en el país “cuando hay crisis económica lo que se está buscando es que lejos de que se deje de utilizar (el combustible), pues al revés, se generan estrategias múltiples para que se siga utilizando con la intención de que se establezcan algunos tipos de estándares económicos”.

Además, dice que en la crisis actual coincidentemente el Gobierno del Estado ha potenciado el uso del automóvil particular con la dotación de infraestructura vehicular, que lejos de mitigar el problema de la contaminación atmosférica, incentiva su uso.

“La gran mayoría (de obras) ha sido para facilitar el uso del automóvil y no dejar de usarlo. Aquí tenemos muchos ejemplos: puentes, pasos a desnivel, toda una serie de cosas que están pensadas precisamente en la gente que tiene automóvil”.

Con dichas obras se privilegia a 30% de los habitantes de la Zona Metropolitana de Guadalajara que cuenta con automóvil propio, mientras que 70% que carece de auto tiene que resolver sus traslados con un sistema de transporte público fragmentado y mal diseñado.

En la zona conurbada de Guadalajara anualmente se generan 400 mil toneladas de contaminantes, de las cuales 90% es producto de los vehículos.

Por lo anterior, Curiel Ballesteros sugiere “como una primera estrategia hacer una reflexión acerca del derroche que tenemos y promover el valor del ahorro, en el sentido de que podemos tener una muy buena condición de bienestar si somos menos consumidores.

Lógicamente al ser menores consumidores, eso implica tener mejores alternativas de uso y tener una información que esté precisando el asunto del consumo”.