Rompen con el círculo de pandillas

GUADALAJARA, JALISCO (27/JUL/2013).- “Por nuestro aspecto, cuando la gente nos ve caminando por el Centro de Guadalajara, cree que los queremos ‘tumbar’, o que somos lacras, pero no es así”. Quien habla es “Fraz”. 24 años, piel morena, gorra y pantalones de un blanco inmaculado. Creció bajo la sombra de la violencia de pandillas en San Juan de Ocotán. A su lado, Joaquín, mejor conocido por su nombre artístico de “Fax”, de 14 años (“pero ya casi cumplo los 15”, dice). Las facciones son de un niño. Pero las palabras, de un joven que ha probado en carne propia la dureza de la calle y alejamiento de los estudios y otras oportunidades. “Es hasta que dejas la escuela, cuando te das cuenta lo que pierdes. Como todos te abren. Uno no agarra la onda a veces, hasta muy tarde”.

La vida de ambos hasta ahora se encuentra está marcada por las carencias, la droga y la violencia en San Juan de Ocotán, Zapopan. Pero el ciclo parece que está por romperse gracias al rap y el programa de investigación e intervención Porque así soy yo.

Porque así soy yo: identidad, violencia y alternativas sociales fue patrocinado con recursos del Gobierno federal a través del Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsemun).

“El proyecto y programa se aplicó a cuatro colonias con cualidades muy específicas”, anota el maestro Miguel Vizcarra, uno de los investigadores de Porque así soy yo. La investigación fue realizada por el Colegio de Jalisco y “las colonias donde estamos trabajando son San Juan de Ocotán, Lomas de la Primavera, Santa Ana Tepetitlán y Mesa de los Ocotes. Todas fueron designadas por el ayuntamiento (de Zapopan) a partir de un cruce de variables de marginación, de violencia y de la delincuencia, enfocada en cuestiones de pandillas”.

Más que música

Una de las dinámicas del programa fue un concurso de rap en estas cuatro colonias, donde se invitó a sus habitantes mostrar a través de las rimas y el ingenio la realidad en la que viven. “No son letras violentas. No nos interesa eso. Ni con malas palabras, sino con ingenio. Queremos demostrar que nosotros también podemos darle cosas buenas a la sociedad”, agrega “Fraz”, ante la atenta mirada de Flor, la mujer de su vida y quien también rapea.

Los ganadores de los concursos en las cuatro colonias se presentarán mañana en Calle 2, en un concierto llamado Rap por Zapopan, que enarbola el slogan “no armas, no drogas, no violencia entre barrios”.

El show, con acceso a todas las edades y gratuito, está abierto a todo el público que ame el género, y especialmente, a aquellos que como “Fraz” y “Fax”  quieren romper con la inercia de la violencia urbana. Aquellos que prefieren apostar por una forma de vida más proactiva. Aquellos que quieren sacudir a la sociedad con su talento y no con los puños.

“No es solamente la música con lo que estamos trabajando”, agrega Vizcarra. “Estamos intentando entrar en cuestiones culturales, llegar a los jóvenes que participan en una pandilla, en un barrio, y demostrarles que se puede salir adelante”.

Coincidencia

Seis meses atrás, “Fax” y “Fraz” ni siquiera se conocían. Su camino se cruzó el día del concurso. Los dos llegaron tarde, sin música e incluso “Fraz” se presentó golpeado, un día antes había peleado en el barrio.

Hoy, sobre el escenario conforman un dueto sólido. No les gusta la palabra dueto, pero se reconocen mutuamente como buenos músicos. “No vamos a dejar a las pandillas”, reconoce el más joven, “pero queremos traer de vuelta lo que aprendamos. Transmitirle a los más chicos que si se pueden juntar a cotorrear, pero sin drogas ni vicio”.

El programa incluyó la aplicación de talleres donde música, solución de conflictos de forma pacífica, educación y derechos sexuales. A los ganadores del concurso se les ofrecieron asesorías sobre creación musical, graffiti y producción, además de la producción de un EP en un estudio profesional. “El concierto no es el final del camino para ellos, sino el comienzo de una serie de metas”, apunta Vizcarra.

El programa terminará de aplicarse en agosto, aunque el académico espera que se dé seguimiento a los jóvenes que pertenecen a pandillas.

EN LA CABEZA
¿Por qué rap?

Miguel Vizcarra explica que la elección del rap fue por la popularidad que tiene este género entre los jóvenes, así como la manera en que las letras que integran las canciones pueden ser un espejo de la sociedad. “Para el rap no tienes que saber tocar un instrumento, ni saber cantar”, apunta “Fax”. “Con que tengas agilidad aquí (señala a su cabeza), basta.

321 pandilleros fueron entrevistados por el proyecto de investigación Porque así soy yo.

96 jóvenes se inscribieron en el concurso de rap, en las cuatro colonias donde fue realizado.