Rechazan ambulantaje en Chapultepec si no está controlado

GUADALAJARA, JALSICO (05/NOV/2012).- Aunque es reciente el anuncio de que a los artesanos ambulantes del Centro de la ciudad los mandarán los fines de semana a la Avenida Chapultepec, los habitantes de la zona reportan que en los últimos dos meses, este tipo de comercio ha venido a más; desde los que venden su material en el suelo, hasta los que caminan cargándolo e incluso se meten a los negocios para pretender hacer sus ventas.

Ante la inminente llegada paulatina de más vendedores ambulantes a la zona, tanto habitantes como comerciantes establecidos la rechazan si ésta se sale de control; pero hay quienes están dispuestos a tolerarla siempre y cuando la venta se realice en lugares fijos y que no afecten a la circulación.

Tal es el caso de Mónica Reyes, quien vive en la zona de Chapultepec. Ella tuvo la oportunidad de ver el domingo por la noche a unos 10 artesanos comerciando sobre el camellón, casi llegando a la Avenida Niños Héroes; nunca antes, dice, había observado que esas personas se colocarán ahí.

En su opinión, el hecho de que lleguen más ambulantes a la avenida beneficiará al ambiente y folclore de la zona, especialmente en días como el sábado, cuando el camellón es usado en gran medida para la venta de artesanías, ropa y libros; sin embargo, si el arribo de comerciantes se sale de control, sería perjudicial, pues "se volvería un mercado".

Víctor Corrales y Victoria Montoya trabajan en un café de la zona; incluso ésta última también vive en ella. Ambos han notado que en las últimas semanas se ha incrementado el número de vendedores ambulantes. La idea de que lleguen más a la avenida no les agrada del todo, pues piensan que, como pasa con el Centro, después incluso será difícil caminar con comodidad por la calle.

Los trabajadores de la zona son el otro sector que no ve con buenos ojos la llegada de más ambulantaje. Diego y Christian trabajan en una pizzería que está sobre Avenida La Paz, a unos metros de Chapultepec; el primero de ellos nota que ha aumentado en la zona la venta ambulante de comida, por lo que teme que pueda afectar al negocio. Christian cuenta que constantemente estos comerciantes abordan a la clientela que está en el lugar donde labora, y además de importunarlos, terminan recibiendo el dinero que bien podría ser para las propinas.

EL INFORMADOR/ ROBERTO MEDINA