''Quisiera que se salvará junto con Temaca''

GUADALAJARA, JALISCO (31/ENE/2013).- Con una texana, Luis Villegas cubre sus canas, pero no la tristeza. Su voz, a veces quebrada, es la prueba de su amor por su comunidad: Acasico, una de las tres poblaciones que serían afectadas con la construcción de la Presa El Zapotillo y que ni con el proyecto de una cortina de 80 metros de altura se salvaría de quedar bajo el agua. 

Luis dejó su casa la mañana del jueves para acompañar a los integrantes del Comité Salvemos Temacapulín  a Guadalajara, donde se daría a conocer la postura de las comunidades sobre el anuncio hecho por el gobernador electo, Aristóteles Sandoval Díaz, en su cuenta de Twitter, donde reiteró su compromiso de campaña: “No vamos a inundar Temacapulín”.

Aunque el milagro parece ocurrir para Temacapulín, poblado del municipio Cabañas de Obregón, para Acasico el futuro está detenido, pero no la fe; Luis trae consigo varios pósters con la imagen de la Virgen del Rosario, los cuales regala, y mientras los entrega, aprovecha para describir el templo de su pueblo: “Es de pura piedra. Mire, vea…, ya vio…”

Sus compañeros le piden que hable como representante su pueblo y él es breve: “Yo soy uno de tantos de los que ‘venemos’ de Acasico a representar a nuestra comunidad, porque nos concierne el mismo problema, al igual que Temaca. Somos originarios de ahí, ahí nacimos, ahí vivimos. Y pues, quisiera que se salvará junto con Temaca.  Que se salven las tres comunidades juntas. No nos corresponde a nosotros sugerir cómo nos van a salvar, pero que no nos afecten”.

De la reubicación al centro poblacional de Talicoyunque, que la Comisión Estatal del Agua ofreció a los afectados,  aún ésta es menor, dice Luis, quien aclara que “desafortunadamente hemos sido amenazados. No podemos expresar nuestras opiniones”.

Aunque sus compañeros no hablan de casas vacías, él sí comenta que serán como 20 porque “las personas se han ido saliendo porque no hay estabilidad ahí, nosotros queremos conversar nuestras comunidades porque valoramos nuestra tierra”. Y de las expropiaciones de predios, Luis asegura que no sabe de casos, pero sí del templo: “Ya vio la entrada…Está hecho de pura piedra…”.

EL INFORMADOR / MAYRA TORRES