¿Qué pasa con el Macrobús?

Es desconcertante para los tapatíos esa pausa incomprensible que se ha dado, acerca del tema de la consolidación del transporte colectivo de la zona metropolitana.

Ha habido multitud de reuniones, debates entre la opción de que siga el proyecto del Macrobús o que se tome la iniciativa del tren ligero; después de muchas reuniones con la presencia del gobernador y principales de su equipo, se declaró que sí al Macrobús y sí al tren ligero, pero sorpresivamente parece que se han detenido ambas iniciativas y en cambio surgen nuevos proyectos, el de la vía express, un segundo piso a Guadalajara, diferentes pasos a desnivel, etc.

Es indispensable retomar como prioridad innegable el tema del Macrobús; ajustándole algunos detalles, es la solución que se debe seguir de inmediato, naturalmente las estaciones deben ser mucho más estrechas, así como el mismo vehículo que transporta los pasajeros.

Desde que tomaron posesión los nuevos alcaldes no se han puesto de acuerdo, algunos se opusieron simplemente por oponerse, hasta que se consiguió la decisión de que sí al Macrobús y sí al tren ligero.

El sistema de transporte colectivo como el Macrobús ha sido probado, como ya conocemos, exitosamente en varias ciudades de países emergentes y también de primer mundo, desde que empezó en los años setenta en Curitiba.

Este sistema de transporte apoyará a la movilidad urbana no motorizada, al rescate del espacio urbano para los peatones y una gran disminución de autobuses, que hoy son un verdadero peligro y un desastre en nuestra ciudad.

Los que se oponen unos simplemente son de la generación del “no” y otros son líderes que manejan el sistema de autobuses, pretendiendo ignorar que los transportistas también serán beneficiados, porque serían socios del sistema de transporte colectivo del Macrobús.

Ya es hora de que la comunidad participemos fuertemente, exigiendo que las autoridades terminen los proyectos que inician y de paso que los fondos del Consejo Metropolitano sean mejor distribuidos, pensando más en el peatón y la movilidad urbana no motorizada, que como hicieron la distribución apoyando 100% a la movilidad motorizada.

Vuelvo a expresar, aunque sea repetitivo, que debemos luchar por una ciudad más humana, más verde para beneficio del hombre y su familia, rescatando la calidad de vida y deteniendo ese rumbo en declive que nos dirige a lo que nunca fue Guadalajara, una ciudad inhóspita, agresiva, aumentando el caos de movilidad y desorden en que estamos inmersos.

Por eso es inminente consolidar y terminar el transporte público ajustando algunos detalles al Macrobús.