GUADALAJARA, JALISCO (15/MAR/2017).- Por llegar sin previo aviso y mostrarse prepotentes los elementos de la Fuerza Única Regional, el presidente municipal de Ocotlán, Paulo Gabriel Hernández, se quejó por el desarme de sus oficiales que desde este martes fueron encuartelados para ser enviados la mañana de este miércoles a capacitación y evaluación en las instalaciones de la Academia de Policía en Guadalajara.“Concretada la acción, el primer edil exhortó a la Fiscalía para que los derechos humanos sean respetados, pues en tono incómodo informó que con lujo de prepotencia los elementos estatales tomaron el mando, permaneciendo aislado todo el personal de la corporación que en ese momento se encontraba en las instalaciones, permitiéndoles retirarse hasta las 9:00 de la noche”, informó la autoridad en un comunicado.Tales declaraciones contrastaron con la información dada por el fiscal General, Eduardo Almaguer, quien indicó la mañana del miércoles que el presidente municipal estaba de acuerdo con la intervención de las autoridades estatales.“No es lo que yo he platicado con él, desconozco cuáles serían las razones que lo llevarían a decir públicamente o afirmar esa situación. Yo me quedo y actúo de manera seria, respetuosa, como hemos mantenido el trabajo con el municipio”.Sin embargo, el fiscal señaló que las instituciones deben “estar alineadas para combatir la inseguridad”.Aun así el presidente municipal desaprobó la manera en cómo irrumpieron “de manera inadvertida y sin ningún aviso o comunicado, elementos de la Fuerza Única Regional asumieron la seguridad ciudadana en el municipio, esto luego de advertirse alrededor del medio día la presencia de un helicóptero que sobrevoló la ciudad”.Este martes, unidades de la Fuerza Única tomaron las instalaciones de la Policía de Ocotlán, en la calle Leandro Valle entre Francisco Zarco y Moctezuma, tras lo que se encuarteló y desarmo a 51 elementos para proceder a su capacitación y evaluación en Guadalajara.“Sin embargo, el primer edil manifestó su inconformidad por las maneras como se condujeron los uniformados del estado en su actuar, esto a causa de que en el relevo de mando no se sujetaron a los protocolos establecidos en materia de colaboración y trabajo coordinado entre la entidad y el municipio por el excesivo alarde de poder”, señala el comunicado.“Es contraproducente que quienes son los responsables de la tranquilidad ciudadana sean los mismos que alteran la paz al provocar temor en la población por las formas en que se hicieron presentes en la ciudad”.El presidente municipal exhortó a las autoridades estatales a cambiar los protocolos de intervención en los desarmes de los municipios.EL INFORMADOR / SERGIO BLANCO