Padecen 50 mil niños de la ZMG Trastorno de Déficit de Atención

GUADALAJARA, JALISCO (11/OCT/2010).- Aproximadamente 50 mil niños varones de la Zona Metropolitana de Guadalajara ( ZMG) —que representa 7% del total de pequeños en edad escolar— sufren de Trastorno de Déficit de Atención (TDA), y casi siempre, quienes identifican el problema son los profesores y no sus padres.

Se estima que en cada salón de clases hay de uno a dos pequeños con este mal, lo que significa un problema importante de salud mental en el Estado, señala el subdirector de Calidad y Gestiones del Instituto Jalisciense de Salud Mental (Salme) de la Secretaría de Salud Jalisco ( SSJ), Eduardo Madrigal de León.

“Estos niños son detectados en primera instancia por los maestros en etapa preescolar o primaria, y justamente observan las principales características del trastorno, que es problema para fijar la atención y la dificultad para controlar sus impulsos y la actividad motriz, que es el clásico niño latoso”.

De no atenderse a tiempo, los niños con TDA tienen mayor probabilidad de tener problemas de conducta en la etapa adulta, como adicciones al tabaco, alcohol y drogas, así como dificultad para relacionarse y conductas impulsivas y actos violentos.

Durante 2009, del total de consultas que ofreció Salme al grupo infantil, 48% correspondió a trastornos hipercinéticos, entre ellos el TDA.

El abordaje para este tipo de padecimientos en los niños, recalcó el psiquiatra, debe ser integral, con un buen diagnóstico médico y tratamiento farmacológico adecuado, así como apoyo a los familiares.

Con motivo del Día Internacional de la Salud Mental, celebrado el pasado 10 de octubre, los días jueves y viernes se llevaron a cabo en Guadalajara las “Jornadas Estatales de Salme, avances en salud mental 2010: La Atención Primaria de la Salud Mental en la Infancia y Adolescencia”, con el objetivo principal de capacitar y actualizar al personal de salud para el tratamiento médico y psicológico del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH).

La idea es que los médicos de primer nivel se sensibilicen con el problema y puedan detectar de mejor manera a un niño con TDA, independientemente del motivo de su visita al consultorio, pues al tratarlo adecuadamente, los resultados son “espectaculares” a beneficio de los niños.

El principal problema para el diagnóstico oportuno de un niño con este tipo de trastorno, es la ignorancia y falta de cultura por parte de los padres de familia, incluso de los mismos especialistas, quienes todavía tienen “prejuicios” en el tema de la medicación en niños.

De acuerdo con Madrigal León, la enfermedad se presenta en una proporción de siete niños por una niña, y esto se debe a cuestiones de maduración cerebral que tiene que ver con la disritmia en los varones.