GUADALAJARA, JALISCO (17/NOV/2016).- Muy despejadas se veían las calles de la zona de venta de autopartes de 5 de Febrero, Los Ángeles y aquellas que las cruzan, tanto de los llamados "coyotes" como de compradores, situación de la que los comerciantes ya se habían dado cuenta. La razón se la atribuyeron al aumento del patrullaje, lo que ha ahuyentado a los clientes.Eduardo Franco vio pasar al comisario de Guadalajara, Salvador Caro, y lo saludó no muy gustoso. En su negocio de faros y calaveras, muy limpio pero sin movimiento, vio más contras que pros en el aumento de la presencia de los oficiales. "Está bien y mal por la situación, no viene la gente, de por sí malo, los retiró bastante, no viene ni un cliente, la gente tiene miedo, lo que compran a veces se los andan quitando la Policía".Aunque es evidente que en la zona algunos comercian partes robadas por unos pierden todos, lamentó. "Hasta dicen que no vengan, dicen en la televisión, mucha gente tiene miedo a venir que porque les roban los espejos". Pidió a la gente que acuda a comprar, pues ahora es más seguro.José Arturo Sandoval vio muy bien el patrullaje y el retiro de los coyotes. "Está bien, me gustaría que siguieran con eso, a mí no me afectan esos operativos".Juan Carlos López trabaja en la zona pero no vende nada, pues su labor está en un taller de reconstrucción, detallado, pulido y cromado de piezas que les llevan. Él es uno de los más inconformes por la intervención de las autoridades."Parece bien pero nosotros que no tenemos que ver con las partes robadas pues sí nos quitó bien mucho cliente, y desgraciadamente somos trabajadores y tenemos el pendiente que en el patrón nos quiera descansar". Estimó una baja de 60% en el trabajo desde la semana pasada.Pidió a las autoridades que ordenen a los oficiales de Policía que sean más atentos y amables con las personas que acuden para que no se las espanten. "Hay muchas autoridades prepotentes, hay unos que te explican y te orientan y otros que nomás dicen que te van a multar".Cuando ven a una persona con su mercancía, dijo, la cuestionan y le piden que muestre sus comprobantes, lo que no siempre puede hacerse. "A veces es imposible porque nosotros nos dedicamos a carros viejos".Ramón Martínez Saucedo, "Don Jaimito Cartero", como le conocen, se dedica a reconstruir parrillas y coincidió con Carlos López, pues a él también le espantaron los clientes. Además, ya está harto de las obras sobre la 5 de Febrero. "Cinco años andan escarbando esta calle, oye, ¿qué no hallan otra calle más de que ésta? La gente no viene, los espantan. Primero estaban escarbando, luego vienen los policías, no tengo trabajo, no tengo ventas".Así, pidió de la manera más atenta a la población que regrese a comprar. "Decirles que vengan, que no hay problema".