'No por mucho madrugar…'

La reserva de votos que representa el electorado de Jalisco destaca porque se encuentra entre las entidades con mayor número de electores, después del Estado de México, el Distrito Federal y Veracruz.

La primera Entidad es enclave priista y tiene al frente del Ejecutivo a uno de los principales prospectos para la candidatura presidencial, Enrique Peña Nieto; mientras que la segunda es bastión perredista, con otro presidenciable al frente, que es Marcelo Ebrard.

Veracruz es tricolor con uno más de los aspirantes, Fidel Herrera; y Jalisco, Entidad panista, tiene al gobernador
Emilio González también en la lista de los selectos que serían presidenciables.

En Jalisco, según los datos del Instituto Federal Electoral (IFE), los nacidos en la Entidad son alrededor de cuatro millones 229 mil 320 ciudadanos, o sea 81.87%, porque aquí hay oriundos de Michoacán, que son 156 mil 358 y representan 3.03%; luego vienen nacidos en Zacatecas que son 111 mil 881, representando 2.17%, y el resto de los que habitan en este territorio son de otras entidades.

Los empadronados suman un total de cinco millones 165 mil 600 jaliscienses, de los cuales sólo en la lista nominal, o sea los que tuvieron en tiempo y forma su credencial de elector para los comicios del pasado 5 de julio, fueron cinco millones 145 mil 010 jaliscienses.

Así de importante es para los partidos políticos lo que se juega en Jalisco en cada proceso electoral, particularmente en los que se ponen en juego la gubernatura y la elección presidencial.

Por eso, los jóvenes políticos que han llegado a cargos de poder tras la elección del pasado 5 de julio están tan inquietos. Cada uno se siente con posibilidades de acceder a la candidatura para llegar a despachar en Casa Jalisco, y cada uno está tratando de vender su proyecto, su discurso y su imagen desde el primer día de este 2010, porque todos pretenden sacar al Partido Acción Nacional (PAN) del Gobierno del Estado.

El jueves pasado, de manera inusitada, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) celebró su aniversario fuera de la Ciudad de México y la cúpula tricolor se dio cita en Zapopan para conmemorar su cumpleaños. Fue un hecho con una fuerte carga simbólica, porque los priistas lograron una de las más sonadas victorias en la elección pasada en la zona metropolitana, donde desplazaron a los panistas de los gobiernos municipales y se hicieron del control del Poder Legislativo, en su alianza con el Partido Nueva Alianza (Panal).

Pero la celebración del cumpleaños priista abrió el espacio para que se desataran los ánimos futuros, particularmente tratando de inclinar la balanza a favor del alcalde tapatío Aristóteles Sandoval, quien parece encabezar, por el momento, las preferencias en su partido con miras a la elección gubernamental.

La oleada “aristotélica” fue atemperada por la presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, quien dijo con rotunda claridad:

“El avance electoral logrado en Jalisco significa gobernar casi 70% de la población; ha significado la multiplicación de nuestra presencia en el Congreso local; la multiplicación de diputación federal jalisciense, ello renueva la esperanza electoral del priismo, en un horizonte positivo”. Para luego rematar: “Como dice el gallo, no por mucho madrugar amanece más temprano”. ¿Así o más claro?

Víctor E. Wario
vwario@hotmail.com