''No hay coordinación''

GUADALAJARA, JALISCO (25/MAR/2013).- —¿Qué opina de que los ayuntamientos toleren la venta de discos pirata en tianguis y mercados?

—Se trata de un descontrol y/o descoordinación de las autoridades municipales con respecto a las federales, pues resulta a todas luces sorprendente que se sigan vendiendo discos de música y películas, entre otros productos, en plena calle, en tianguis y en cualquier lugar, cuando existe una ley que sanciona penalmente esta práctica. Si bien es de corte federal, no se aplican los mecanismos para su aplicación efectiva en las entidades y municipios, por lo tanto hay omisiones graves en los tres niveles gubernamentales para su aplicación formal.

—¿Por qué no funcionó la comisión intersecretarial para combatir el contrabando, la piratería y la economía ilegal?

—Mientras que en dicha comisión no estén al frente los representantes de las empresas directamente afectadas y que exista plena disposición política de parte de las autoridades involucradas, en sus tres niveles de interacción, difícilmente funcionará, puesto que, si falla la coordinación, a partir de la falta de seriedad de quienes deben hacer cumplir la ley, las acciones se dilapidan y el desgaste de sus miembros se incrementa por no ver resultados concretos.

—Si el 60% de la población trabajadora se encuentra en la informalidad, ¿el combate contra la piratería está condenado al fracaso?

—Recordemos que ambos fenómenos son estructurales y que la raíz que los genera es la incapacidad del sistema económico para generar empleos bien remunerados. Mientras eso no se resuelva paulatinamente, difícilmente podrán erradicarse porque, ante la falta de ocupación, la gente necesita un ingreso indispensable para solventar los gastos personales y familiares, por lo que se autoemplea o bien se desempeña en actividades informales, muchas veces relacionadas con la venta de productos apócrifos, los cuales le permiten una mayor retribución, porque explotan cómodamente ante la negligencia y falta de coordinación de las autoridades.

Se requieren, pues, acciones integrales para combatir la piratería, que emanen de un diagnóstico completo por sectores y tipos de productos, que aterricen en escalas geográficas regionales y locales, en donde es palpable su proliferación, comenzando por las tres grandes ciudades del país, que es donde finalmente se comercian dichos productos. Esto posibilitaría su ataque frontal, pero en paralelo con una política de empleo formal.