Nadie regresará la sonrisa de Miguel Ángel

GUADALAJARA, JALISCO.- Aunque nadie le regresará a Martha Ruvalcaba la sonrisa de su nieto Miguel Ángel López Rocha, al menos la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por la muerte del pequeño que cayó al Río Santiago, “es el primer paso para hacer justicia”.

La abuela, quien se enteró de la recomendación (12/2010) por los medios de comunicación, asegura que “al menos ya se reconoció que mi niño murió por arsénico y personalmente no espero una indemnización; lo que pedimos es el saneamiento del Río Santiago”.

El organismo dirigió el documento a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) el 2 de marzo, como dependencia responsable por la contaminación del Río Santiago, por lo que interpondrá una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR).

La CNDH concluye que el niño Miguel Ángel murió por intoxicación de arsénico, así como los riesgos a la salud que existen para las poblaciones aledañas.

Martha Ruvalcaba resalta cómo las dependencias estatales han negado esta situación, “y ahora les digo que están ciegos, que no quieren ver la realidad, niegan algo que es evidente”.

Considera que la postura de la CNDH servirá para hacer justicia y “para que se avance en el saneamiento. Eso es lo que hace falta, porque aún hay mucha gente que vive cerca de la contaminación. Pienso que es lo único que alcanzaría para curar la pena moral... porque nada me regresa los juegos de mi niño, su sonrisa... todo se acabó. Al menos que esto sirva para un bien general, porque imagínese que otra criatura se caiga a ese río que está tremendamente contaminado”.

Postura federal apoya la “macrorecomendación”

Para el tercer visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ), Alfonso Hernández Barrón, la postura de la CNDH confirma lo que para los jaliscienses es obvio desde hace años: el Río Santiago afecta la salud de los pobladores que viven en las zonas aledañas.

“Esto afecta a distintos derechos, principalmente el derecho a la salud, y viene a confirmar lo que nosotros ya hicimos en la recomendación 01/2009, por la contaminación del Río Santiago”.

Agrega que esto marca un hito en la historia de las defensorías públicas, pues prácticamente los derechos sociales no se respetan en el país. “Y particularmente en los derechos ambientales, pues consideramos que esta forma de abordar el tema del Río Santiago abre la puerta para que las defensorías públicas aborden otros problemas de contaminación y de cuencas que tienen la misma problemática”.

Hernández Barrón recuerda que en Jalisco ya se iniciaron investigaciones por la contaminación del afluente, por parte de los ayuntamientos de El Salto y Juanacatlán.

“La denuncia que presente la CNDH ante la PGR, tendrá que revisar los avances que tenemos en la investigación que actualmente existe en la delegación Jalisco; esto fortalece el reclamo de justicia por este tema y permitirá que se reactive el tema de la recomendación que nosotros emitimos (la 01/2009, conocida como la macrorrecomendación)”.

FRASE

"Al menos que esto sirva para un bien general, porque imagínese que otra criatura se caiga a ese río que está tremendamente contaminado" Martha Ruvalcaba, abuela de Miguel Ángel López Rocha.

La recomendación de la CNDH

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió el pasado 2 de marzo la recomendación 12/2010, en la que señala que presentará una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) por la muerte del niño Miguel Ángel López Rocha, quien se intoxicó con arsénico después de caer al Río Santiago en 2008.

El ombudsman nacional, Raúl Plascencia Villanueva, pide que se investigue la responsabilidad de los funcionarios de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que han omitido su responsabilidad en el saneamiento del afluente.

Y es que del análisis lógico-jurídico, la CNDH “cuenta con elementos que acreditan violaciones a los derechos a la conservación del medio ambiente, a la protección de la salud y a la vida en agravio de Miguel Ángel López Rocha, imputables a servidores públicos de la Conagua, toda vez que dicha autoridad conforme a las atribuciones que tiene conferidas por ley, no ha cumplido con la responsabilidad que tiene”.

Por ello, las recomendaciones al titular de la Conagua, José Luis Luege Tamargo, son que proceda al resarcimiento de los familiares del pequeño; que colabore en el inicio y trámite de la queja de la CNDH; que coopere en las investigaciones derivadas de la averiguación previa ante la PGR; que tome medidas urgentes para advertir a las poblaciones aledañas al Santiago sobre el riesgo que implica el contacto con éste; y que expidan políticas públicas en materia de conservación al medio ambiente.

Los puntos clave

-La CNDH recibió el 6 de febrero de 2009 la información de presuntas violaciones a los derechos humanos del pequeño de nueve años de edad, Miguel Ángel López Rucha,  atribuibles a servidores públicos de la Conagua, “toda vez que el 25 de enero de 2008, el pequeño cayó al río Santiago, sufriendo intoxicación aguda por arsénico, debido a la contaminación de dicho río”.

-La información que envió la Conagua a la CNDH demuestra que los sedimentos de los ríos Santiago y Zula presentan altas concentraciones de metales como mercurio, cromo, cobre y zinc, y en algunos sitios rebasan los límites máximos permisibles.

-Enlistan una serie de estudios que revelan lo evidente: la grave toxicidad del afluente.

-La CNDH concluyó que la muerte de Miguel Ángel no se debió a traumatismo craneoencefálico, como lo argumentaba el Gobierno del Estado de Jalisco.