Municipios, sin datos suficientes para combatir a las pandillas

GUADALAJARA, JALISCO (24/ENE/2016).- Al “Neggro Azteca” la música lo salvó de la cárcel y la muerte. Tiene 34 años de edad y 14 en la música. Nació en Guadalajara, pero vivió en Estados Unidos, país en el que fue pandillero. Actualmente “El Neggro” imparte el taller Líricas de Tlaquepaque, en Tateposco. En este proyecto enseña a los jóvenes participantes a producir una canción de rap o hip hop desde la raíz para alejarlos de las pandillas y la violencia.

Las administraciones de Guadalajara, Zapopan y Tlaquepaque desconocen el número exacto de pandillas que hay en sus territorios. Esta situación implica que se retrase la aplicación de medidas de prevención que ayuden a que los integrantes de estas agrupaciones no cometan delitos como robar o vender droga.

Según los datos más recientes del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, Prevención y Readaptación Social de Jalisco, de 2008 a 2011 el número de pandillas en Zapopan pasó de 35 a 198; en Guadalajara de 59 a 144; en Tlaquepaque de 43 a 264 y en Tonalá de 23 a 68. En Tlajomulco reportes municipales detectan a 48 pandillas.

Pero los municipios manejan otras cifras: el Departamento de Prevención del Delito de la Dirección General de Seguridad Pública de Zapopan dice que en el municipio hay más de 400 pandillas.

A través de un diagnóstico en el que se acentúa la presencia de nuevos grupos en las colonias Valle de los Molinos, Los Molinos y Misión del Bosque, la dependencia destaca que es necesario actualizar el registro de estas agrupaciones, pues en  2011, según cifras oficiales, se destaca la existencia de 183 grupos en 72 colonias.

En Guadalajara admiten la existencia de 121 pandillas. Mientras en la Zona 2, que comprende la Minerva se registra la existencia de un grupo llamado “Pueblo Quieto”, que se reúne en la confluencia de Tormenta e Inglaterra, en la Zona Cruz del Sur, donde se encuentra El Sauz y Del Fresno se contabilizan 47.  

En Tlaquepaque, de las 264 pandillas detectadas, 15 son de alta peligrosidad según reportes de las autoridades. Ellas aglutinarían a más de cinco mil 600 personas.

Al igual que Zapopan, las direcciones de Seguridad de Guadalajara y Tlaquepaque realizan una evaluación de estos grupos para poder aplicar acciones preventivas.

Tonalá identifica a 68 pandillas, nueve de ellas son de alta peligrosidad y 22 de media “Los Fantasmas 23” son uno de estos grupos. La autoridad municipal ya aplica un operativo antipandillas.

En Tlajomulco de Zúñiga se realizó un censo y reflejó que operan 13 pandillas con más de 600 miembros, principalmente en las zonas de Chulavista y Santa Fe.

LA VOZ DEL EXPERTO
Marginación, uno de los factores

Rogelio Marcial. Investigador

Rogelio Marcial, investigador del Colegio de Jalisco, explica que el aumento de las pandillas tiene que ver con el crecimiento de la mancha urbana, que da lugar a asentamientos irregulares y con poca infraestructura que incentivan la creación de estos grupos, aunque no todos cometan actos delictivos.

El especialista agrega que las autoridades deberían preocuparse más por el aumento de la violencia que hay alrededor de las pandillas. “Lo que se tiene que trabajar es que, aunque crezcan, no representen cuestiones de riesgo para los jóvenes que las integren y para la sociedad y la colonia en la que se ubican”.

Explica que desde los años 70 a las pandillas se les relaciona con la delincuencia y las adicciones, aunque no todas cometan este tipo de actos. Agrega que para ayudar a este tipo de jóvenes es necesario crear espacios recreativos, empleos con seguridad social y apostar por la educación y la cultura. “No es descubrir el hilo negro. En otros países esta fórmula ha servido”.

CRÓNICA
Música para abatir la violencia y las adicciones

Le dicen “Neggro Azteka” y tiene 14 años como músico. Tiene 34 años pero a sus fans les dice que tiene 23. Tiene tres hijos: una de nueve, uno de cinco y otra de dos. Nació en Guadalajara, pero vivió en Estados Unidos. Allí anduvo mal. Se metió, como él dice, en “el jale de las pandillas”. En la calle encontró el delito, pero también la música. Un día lo contrató Capital Records. Dejó la calle, se metió, como él dice, en el negocio de la música. Si no fuera por esta vocación hubiera terminado en la cárcel o muerto.

Actualmente el “Neggro Azteca” participa en el taller Líricas de Tlaquepaque, que se lleva a cabo en una finca de Tateposco. Mientras hunde la cara en la pantalla de una computadora portátil, el músico dice que en este proyecto enseña a los jóvenes a producir una canción de rap o hip hop desde el principio. Les comparte su experiencia, les da sugerencias para que dominen su pasión.

Según “El Neggro”, el objetivo de este taller es ayudar a los participantes para que se alejen de la violencia que generan las pandillas: “Uno anda en la calle y ve cómo andan: en pandillas, en drogas. Los talleres les dan otra opción. La mayoría de los muchachos no tienen los recursos para pagar un estudio, para pagar su equipo o para pagar una escuela. Pero tienen el hambre, tienen el talento, lo quieren hacer y lo demuestran”.

En la finca en la que se desarrolla la sesión están, además del “Neggro Azteka”, “Kene Rap”, Ignacio “Saint Crazzy”, “C.T. MAN”, “Bloner” y “Deefer”. Este último, Erick Fernando Estrada, acudió desde la Colonia Pajarito, en Tonalá, para poder aprender algo de rap. Estudiante de preparatoria, el joven de 20 años de edad se enteró de este taller porque uno de sus amigos, Óscar, compartió los detalles a través de las redes sociales.

Miguel Vizcarra, maestro en Estudios sobre la Región por el Colegio de Jalisco, también está presente. Destaca que los tres meses que dura el taller son insuficientes.

Cuenta que para impulsar Líricas de Tlaquepaque, que se realiza con recursos del Programa Nacional de Prevención del Delito (Pronapred), se llevó a cabo una encuesta entre los habitantes de Tateposco, Los Puestos y Francisco Silva Romero para saber qué tipo de instrucción les gustaría recibir. Las opciones eran: rap, producción musical, carpintería, albañilería. Eligieron rap y producción musical. Se inscribieron 20 personas a este taller dedicado a personas mayores a los 15 años.  

“Neggro Azteka” en las letras de las canciones, ha visto cómo los participantes expresan su forma de vivir y cómo los juzga la gente.

El caso de Zapopan y sus estretegias

Con los 39 millones de pesos que recibió del Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsemun) y las aportaciones municipales, Zapopan tendrá 50 millones de pesos para atender los problemas de inseguridad en el municipio: cuatro millones de esta bolsa se gastarán en programas de prevención que atiendan a las pandillas.

Sin embargo, el director de Programas Sociales Estratégicos, Alfredo Aceves, dijo que a la aplicación de estos recursos se une la implementación del programa Barrios Amables, con el Ayuntamiento de Zapopan buscará ayudar a habitantes de zonas desfavorecidas del municipio en las que se acentúa la presencia de pandillas. Algunas de estas son Las Mesas, Santa Ana Tepetitlán, Carretera a Tesistán, Miramar y Lomas de la Primavera. Agregó que para 2016 se pretende invertir al menos 20 millones de pesos para atender esta problemática: 10 millones del municipio y el resto de recursos federales.

El programa “Barrios Amables” arrancó en la Colonia Constitución. Se realizó una intervención sobre el corredor de la calle Constituyentes en la que participaron los vecinos. Los delitos con más incidencia en la Constitución son el narcomenudeo y el robo de vehículos y negocios.

Barrios Amables nació en 2012 con el objetivo de reducir las brechas de desigualdad en Zapopan. Inició con actividades en las cuales los niños pintaron las banquetas de sus colonias y expresaron lo que veían en ellas. Le siguieron recorridos en bicicleta en los que los habitantes reconocieron su propio barrio y se hicieron intervenciones participativas para transformar lugares icónicos.

La administración reconoce que en el municipio hay más de 400 de estas agrupaciones. Rogelio Marcial y Miguel Vizcarra, investigadores del Colegio de Jalisco, aseguran que a finales de 2012, Zapopan identificaba varias colonias como focos rojos y se seleccionaron cuatro de ellas: Lomas de la Primavera, Mesa de los Ocotes, Santa Ana Tepetitlán y San Juan de Ocotán que intervenirlas y actuar con los jóvenes.

Se produjeron discos musicales, se realizaron conciertos, concursos de perros y talleres de capacitación. Este proyecto también derivó en la consumación del documental Donde moran los sueños, de Jonás González-Illold.

Rogelio Marcial apuntó que en Lomas de la Primavera los jóvenes participaron en la grabación de un CD. Con el dinero obtenido por la venta de este producto musical, los participantes pusieron un estudio de grabación en el que a veces reciben a miembros de otros grupos rivales con los que realizan producciones de manera conjunta.

NUMERALIA
Agrupaciones detectadas en la ZMG

144 pandillas hay en Guadalajara según el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública, Prevención y Readaptación Social de Jalisco (CCSPPRSJ).

121 pandillas reconoce la Policía tapatía en sus investigaciones.

198 bandas se aglutinan en Zapopan señalan los informes del CCSPPRSJ.

400 pandillas identifica la Policía de la ex villa maicera según estudios propios.

264 pandillas hay en Tlaquepaque, coinciden las cifras del CCSPPRSJ y de la propia Policía municipal.

68 pandillas hay en Tonalá destaca el estudio elaborado por el CCSPPRSJ y respaldado por datos municipales.

48 bandas se concentran en Tlajomulco, en un padrón elaborado por la Policía municipal.

LA CIFRA
901 pandillas existen en la ciudad, según policías municipales.