Mario Rivas Souza, seis décadas entregadas a su profesión

GUADALAJARA, JALISCO (22/FEB/2011).- Después de 60 años de vida profesional, el doctor Mario Rivas Souza, quien ayer fue galardonado con el título de “Doctor Honoris Causa” por parte de la Universidad de Guadalajara ( UdeG), confiesa que la semana pasada pensó en el retiro a causa de una hemorragia intestinal que casi le cuesta la vida: “Sangré profusamente y dije: yo creo que ésta es la última, y pues no. Dios me salvó la vida y aquí estoy con ustedes afortunadamente”.

Recuerda que el caso del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, a quien le realizara la autopsia luego de ser victimado a tiros “fue difícil hasta cierto punto, porque nadie le quería entrar. Tan es así, que luego tuve yo dificultades con personas de México, de la Procuraduría General de la República, porque ellos decían que las heridas de proyectil de arma de fuego se las habían dado por a espalada”.

“Yo, Mario Rivas, desvestí al cardenal, porque ni si quiera había quien lo desvistiera. Yo sabía dónde tenía los balazos y yo dije lo que tenía que decir, y nunca me he rajado de lo que yo dije”, asesta el ilustre médico.            

Durante el evento, celebrado ayer en el paraninfo Enrique Díaz de León, el rector de la UdeG, Marco Antonio Cortés Guardado, celebró la ética con la que el galardonado se ha conducido a la largo de su trayectoria en las ciencias forenses y en la medicina legal.   

“No exagero al afirmar que es gracias al doctor Rivas Souza que nuestra Entidad cuenta con una respetable cantidad de notables profesionistas en el área de la medicina legal, además de la consolidación de espacios e instalaciones gubernamentales dignas para ejercer”.

Perfil

Jesús Mario Rivas Souza

Nació el 20 de mayo de 1923 en Guadalajara. Los primeros años de su infancia los vive en el Rancho de San Antonio de los Rivas, en La Barca, Jalisco. Tiempo después, la familia llega a Guadalajara e ingresa al Instituto de Ciencias, donde cursa la educación secundaria y preparatoria. En 1946 inicia sus estudios profesionales en la Facultad de Medicina de la Universidad de Guadalajara y se gradúa el 20 de noviembre de 1952, en la que fuera la primera generación del Plan Mendiola. A partir de ese año y hasta 1960 fue médico residente y cirujano en la Delegación Jalisco de la Cruz Roja, cuando ésta inauguró su edificio.

De 1953 a 1958 fue invitado a trabajar como secretario del Departamento de Medicina Legal del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco, y hasta 1979 como jefe del mismo departamento.

De 1979 a 1998 se desempeñó como director del Departamento de Medicina Forense de la Procuraduría General de Justicia del Estado.

Desde su fundación, en julio de 1998, se ha desempeñado como director del Servicio Médico Forense del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.