Luege Tamargo minimiza observaciones de la ONU

CAÑADAS DE OBREGÓN, JALISCO (19/ENE/2012).- Para el director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo, “no hay razón” en las observaciones que hizo el año pasado el relator especial de las Naciones Unidas para la Alimentación, Olivier de Schutter, respecto a ciertas “omisiones” en el derecho a la alimentación para los habitantes del pequeño poblado que se prevé inundar para dar paso a la Presa El Zapotillo, que actualmente registra un avance del 40 por ciento.

De acuerdo con la autoridad máxima en la Conagua, el título de relator y su adhesión a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) no garantiza certeza y verdad en su discurso; sobre todo porque, dijo, el representante internacional carece de información respecto a las “bondades” que traerá consigo este proyecto, que calificó como la “prioridad” de Conagua en lo que resta de la administración en curso.

“No porque alguien venga con un título como relator de la ONU quiere decir que tenga razón en lo que dice. Esta persona no conoce el proyecto y, por supuesto, no sabe nada de lo que acabo de explicar: de la necesidad de fondo que tiene la región de salvar sus acuíferos, de la necesidad de garantizar el abastecimiento de agua y de los beneficios que van a tener las comunidades”.

Agregó que De Schutter ignora también el hecho de que El Zapotillo permitirá subsistencia de agua potable para dos millones 400 mil personas de León, Guanajuato; los Altos de Jalisco y la Zona Conurbada de Guadalajara, mientras que sólo causará una “afectación relativa” a menos de 500. Por esta razón, invitó a “no dejarse impresionar” y a “no creer que tiene la razón”.

Según expuso, no se permitirá que el embalse comience a llenarse en tanto no se faciliten los terrenos que aún habitan ciertos habitantes de los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo. Mencionó que la expropiación de tierras es una alternativa latente, pero que a la fecha no está contemplada, pues se aún se busca el diálogo y llegar a acuerdos, “en beneficio de todas las partes” involucradas en las negociaciones.

Recalcó que la tarea de retirar, “piedra por piedra”, los bienes históricos del antiguo poblado de Temacapulín, sigue en pie, por lo que aseguró que la iglesia, la plazoleta principal e incluso el panteón local, entre otros sitios, serán reubicados para evitar que sean sepultados por los más de 900 millones de metros cúbicos que albergará la represa en cuestión.

EL INFORMADOR / ISAACK DE LOZA