Hacen Periférico para cinco mil autos por hora; circulan 15 mil

GUADALAJARA, JALISCO (11/MAY/2015).- Son incuantificables y están en todos lados. Los ciudadanos los padecen. El crecimiento de personas y vehículos en la ciudad de Guadalajara ha propiciado que cada vez más y más intersecciones de calles y avenidas se conviertan en “cuellos de botella” de los que resulta muy complicado salir.

Porque se disparó el número de vehículos y en la metrópoli hay dos millones; porque el transporte público sube o deja pasaje; porque el conductor que va adelante está revisando su cuenta de Facebook; porque el “limpiaparabrisas” aún no termina de retirar el jabón del vidrio; porque la venta de aguas, golosinas, juguetes o cargadores para teléfono aún no se concreta, o porque quien va al volante simplemente está distraído. Todas son razones por las que el “atorón” se complica, pero la realidad es que hay arterias rebasadas. No es un problema reciente.

Francisco Poe Morales, comisario de Vialidad de la Secretaría de Movilidad (Semov), expone que el Anillo Periférico se diseñó para una capacidad de autos que hoy se ha triplicado. Tal es la razón por la que salir o entrar de la ciudad resulta estresante, especialmente en “horas pico”.

Uno de estos casos es en el cruce de López Mateos, que desde hace años resiente los estragos del crecimiento de habitantes en el Sur de la ciudad. A diario, y tanto en la mañana como en la noche (en los horarios de ingreso y salida al trabajo o escuela), los dos sentidos de esa vialidad lucen completamente atiborrados de automóviles.

“El Periférico se hizo para tener cerca de cinco mil vehículos por hora, y está rebasado en tres veces más. Entonces, al dar vuelta en el nodo de López Mateos, (los vehículos) se integran a los carriles centrales (...) ese cruzamiento hace que sea muy lento. Tanto para Periférico, como para López Mateos. Y en ambos sentidos”.

Detalla que la ausencia de banquetas, de pasos peatonales y la gran cantidad de automotores que la transitan por minuto ha aumentado el tiempo de desplazamiento para los ciudadanos que deben usarla.

Por supuesto, ese no es el único punto. Tanto en el Sur como en el Norte, y así en el Oriente como en el Poniente, los habitantes de Guadalajara se han ido adaptando a circular cada vez a una menor velocidad y a “estacionarse” por ciertos periodos en avenidas de gran afluencia, como lo es el Periférico.

Hoy, la autoridad en la materia no sabe exactamente cuántos puntos de conflicto vial son, pero sí augura que son “cientos”. También afirma que hay soluciones, pero que éstas dependen de una mayor asignación de recursos e inversiones en esta materia.

El mando de la Policía Vial detalla que la circulación promedio en la ciudad es de 17 kilómetros por hora, y que día con día hay alrededor de 300 automóviles más en la ciudad. Actualmente son 2.3 millones; en el año 2001 eran apenas 855 mil, según cifras de la Semov.

Eso: el incremento de autos y personas, aunado a un sistema de transporte público “insuficiente” para cubrir las necesidades de la población, inciden en tiempos de traslados prolongados, y en la proliferación de percances, según el mapa de siniestralidad que recientemente presentó la Semov.

Por ello una de las soluciones viales para el transporte público, que aminoraría el conflicto vial, es la operación del proyecto del Peribús.

CRUCEROS CON ATORONES Y SOLUCIONES

Lázaro Cárdenas y Carretera a Chapala	Viaducto López Mateos y Plaza del Sol	López Mateos y Mariano Otero	Mariano Otero y Faro	López Mateos y Periférico	8 de Julio y crucero de San Sebastián
Un cuello de botella que pudo ser modificado desde la habilitación del puente elevado, pero en su lugar añadieron dos carriles más. No se ampliaron los camellones, por lo que hay tráfico siempre para ingresar a la ciudad.	Es necesario construir más puentes peatonales.	Los semáforos de la glorieta inciden en afectaciones viales. A finales del año pasado, la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP) dijo que habría una intervención en el punto. También se instalarían semáforos inteligentes.	Necesario un paso a desnivel, pues la cantidad de eventos y la concurrida asistencia han abarrotado el crucero.	Nodo vial rebasado. Cruces desordenados para tomar cualquiera de las avenidas. No tiene banquetas ni pasos peatonales. Señalética y balizamiento desgastados; incluso inexistentes.	Obra que necesita terminarse. Hay fallas técnicas. Falta comprar terrenos y ampliar avenidas.
Colón, entre Lázaro Cárdenas y Periférico	Adolf Horn y Periférico	Federalismo y Maestros	Ávila Camacho y Avenida de la Presa (próximo a Patria)	Federalismo y Ávila Camacho	Tesistán y Aviación
Una de las pocas entradas y salidas del transporte de carga hacia el Mercado de Abastos. Circulación lenta y cargada de tráilers y unidades del transporte público.	Un cuello de botella que no puede modificarse, debido al paso subterráneo del Acueducto Chapala-Guadalajara.	Cierre al paso por las obras del Tren Eléctrico. Probabilidades de que se cierre permanentemente, aunque eso dependerá del avance de los trabajos.	Múltiples topes. La autoridad vial sugiere retirarlos y ampliar carriles.	Se modificará después de que entre en operación la Línea Tres del Tren Ligero. Hay caos vial por las obras.	Un tianguis semanal entorpece el tráfico. Se modificará el paso a desnivel para conectar con la Avenida Santa Esther.
Tesistán y Arco del Triunfo	Juan Palomar y Vallarta	Circunvalación y Alcalde	Juárez y 16 de Septiembre	Alcalde y Plan de San Luis-Jesús García
A la espera de que concluya la Línea Tres para modificar el crucero.	Necesita modificación de entradas a la plaza comercial desde Juan Palomar, ya sea reubicarlas o cerrarlas. Necesarios, retornos desde Avenida Vallarta. Se necesita obra.	Uno de los cruceros más conflictivos. Glorieta amplia, varias rutas de transporte público, movimiento constante de peatones por la ubicación de dependencias de Gobierno.	El problema es por el paso peatonal. Se han puesto y quitado macetones. Francisco Poe acepta que el crucero está rebasado.	Vueltas a la izquierda provocan congestionamiento vial. Falta sincronía de semáforos.

FALLAN POR INTERMITENCIAS EN LA ELECTRICIDAD

Inservibles, uno de cada 5 semáforos

Además del acumulado de autos y de que las vialidades de la ciudad están rebasadas, los cientos de cruceros en donde la circulación de vehículos se “ahorca” también padecen por la falla en los semáforos. De acuerdo con el comisario de Vialidad, Francisco Poe, los reportes de este tipo son tantos, que la Comisión Federal de Electricidad ( CFE) “no se da abasto” para resolver las contingencias.

La coordinación con ellos, dice, es continua. Pero hay ocasiones en las que los dispositivos no son atendidos hasta en dos días. Entonces, los policías viales deben atender la eventualidad y ayudar a desahogar el tráfico.

Según el mando de la Policía Vial, hay hasta 20% de semáforos con daños. Pero no porque hayan rebasado su vida útil sino por intermitencias en la electricidad.

Dice que también los reportes ciudadanos por fallas detectadas en la sincronía (que no por ubicación) llegan en grandes cantidades a la secretaría. Éstos los atiende el área técnica de la dependencia.

Se le pregunta al funcionario por qué situaciones adicionales hay tantos puntos de la metrópoli con problemas de desplazamiento. Su respuesta: “Dos millones 300 mil vehículos no caben en la ciudad. Y más cuando es viernes de quincena”.

Hay una estrategia, afirma, para aminorar los estragos. Se refiere a las labores diarias de los mil 800 policías viales. “Si no lo hiciéramos, esto sería un caos”.

Guadalajara casi ha quintuplicado la cifra de autos en el padrón, pasando de 500 mil vehículos en 1995 a dos millones 300 mil en la actualidad. Eso ha entorpecido sustancialmente la velocidad promedio de desplazamiento, hecho que “preocupa” a las autoridades, especialmente cuando baja de 30 kilómetros por hora.

Ello, aunado a que hay menos oficiales viales. En la década anterior hubo un punto en el que el personal de la Policía Vial constaba de dos mil 300 elementos. Hoy, ni siquiera los mil 800 están atendiendo las funciones propias de un agente; un porcentaje importante de éstos son mujeres que se sumaron a los programas de alcoholimetría y de verificación al transporte público.

Así, detalla, la mancha urbana creció en casas y en vehículos a un ritmo por completo desigual al que lo ha hecho en infraestructura: avenidas, calles y servicios básicos. “No hay nada planeado. Se hicieron primero las casas y después se pidieron los servicios (...) Primero construyen y luego buscan la infraestructura”.

VOCES

Las posibles soluciones

"La metrópoli ha crecido de manera desmedida y la convivencia entre la población y los distintos medios de transporte (motorizado y no motorizado), conjugada con una población en proceso de educación en temas de seguridad vial, se convierten en factores de riesgo para la ocurrencia de los accidentes viales".

Francisco Poe, comisario de Vialidad.

"Si tendemos a los servicios de proximidad, en donde nosotros caminemos para ir a la tienda, al parque, para llevar a los hijos a la escuela, entonces vamos mitigando el tráfico y resolviendo el conflicto".

Jenaro De Silva, académico del ITESO.

"Se presentarán algunas soluciones de bajo y alto costo para quien corresponda. Sí es importante que nosotros digamos: aquí hace falta esto, ayúdennos a corregirlo porque nosotros no tenemos tanta gente para cuidar".

Francisco Poe, comisario de Vialidad.

CRÓNICA

Salir a tiempo... una solución

Entra a las ocho y media al trabajo, pero debe despertar desde las seis para comenzar a arreglarse y “salir a tiempo” de su casa.

“Salir a tiempo” es su frase diaria. Es lo que piensa cuando pone el despertador en las noches, y cuando el espantoso sonido de alerta lo regresa a la realidad, cinco minutos antes de las seis de la mañana.

“Es lo que tarda el bóiler en calentarse”.

Guillermo Monte debe sortear a diario el tráfico que se acumula desde las siete de la mañana en la Avenida López Mateos. Sabe que no puede hacer mucho; acaso mentalizarse para que el viaje diario hacia su trabajo, ubicado en el Centro de Guadalajara, sea menos molesto.

"Clutch" y freno. Primera y segunda. El recorrido desde la colonia Agua Blanca Industrial hacia el primer cuadro de Guadalajara le toma hasta una hora, y desde que recuerda no ha podido meter la tercera velocidad de su Chevy en los viajes matutinos.

Lucha por entrar a la avenida. Sufre aún más por cambiar de carril. Ha buscado vías alternas, pero cada intento se traduce en más minutos perdidos en la fila sin fin de vehículos. “Ya me las sé todas. El problema está en que si entras a la lateral, está más llena aún”.

Conduce sin ganas de lunes a viernes, pues sabe que al regresar a su hogar indudablemente encontrará el mismo panorama sobre esa arteria. Sufre porque su auto no tiene estéreo, y depende de que la aplicación de radio que bajó a su celular “tenga ganas” de encender. Así puede escuchar las noticias y pensar en ellas, en lugar de estresarse por el sonido de claxon que hacen sonar con insistencia los otros carros.

O evadir la tensión de ver que el auto de adelante se le metió a la fuerza, sin encender sus luces direccionales.

O escapar al enojo tras evitar al carro cuyo conductor casi lo choca por ir “whatsapeando”.

O mejor pensar en quién es “el menos peor” de los candidatos que escucha en radio, en vez de agarrar a golpes al tipo de adelante, que decidió que aún con semáforo en verde era un buen momento para ordenar su jugo de la mañana y esperar cambio para un billete de 100.

Pero aún tiene oportunidad de llegar al trabajo. Apenas han pasado 20 minutos y ya va a la mitad del recorrido. A partir de ese punto, su preocupación será encontrar un sitio para estacionarse.

Eso es todos los días.

LA VOZ DEL EXPERTO

Servicios de proximidad, un paliativo

Jenaro de Silva (urbanista y académico del ITESO).

El primer paliativo para reducir el estrés, la contaminación y los tiempos muertos de un tráfico abarrotado en calles y avenidas está en los ciudadanos. En la medida que éstos decidan usar menos el automóvil y optar por una bicicleta, o caminar, el impacto será notable.

En la opinión del urbanista y académico Jenaro De Silva, promover una “cultura de servicio de proximidad” traería beneficios en el corto plazo.

“Si las personas no usamos el automóvil para dejar al niño en las escuelas, si salimos a hacer ejercicio al parque próximo a la casa, si tendemos a ‘nuclearizar’ nuestra vida en territorios más próximos, no sólo reducirá el tráfico sino que impactará en la estructura barrial, que ya nos es muy familiar y conocida”.

En tanto se garantice que los servicios que requiera la población se encuentren cerca de ellos, dice, el Estado estará abonando a una solución que mejorará las condiciones de tránsito y, por ende, la calidad de vida.

Hoy, la ausencia de ello incide en una “cultura generalizada por el uso del automóvil” que se refleja en pérdida de tiempo. Y dado que hay un crecimiento notable en los movimientos que apoyan medios alternos de transporte, como la bicicleta, llama a aprovechar esa efervescencia y sumar voces a ella, pues está atrayendo la atención de las autoridades.

Concluye que las decisiones tomadas por las autoridades del siglo pasado para una Guadalajara “moderna”, en la que se apostó a la habilitación de más calles para más autos, terminaron no siendo las correctas.

"Creo que vienen mejores tiempos, en lo que la ciudad gradualmente va a mejorar sus condiciones físicas: más adecuadas a la vida humana".

CLAVES

Histórico

Padrón: En 1995 había 265 mil vehículos en la ciudad. Mil 500 de ellos eran unidades del transporte público. 20 años después, la cifra de automóviles particulares en el padrón de la Zona Metropolitana de Guadalajara creció a dos millones 300 mil.

Plantilla: Hay mil 800 oficiales viales en la Secretaría de Movilidad. Entre ellos se encuentran las “toritas” que asisten en el operativo “Salvando vidas” y las que realizan las revisiones a las unidades del transporte público.

Soluciones: La Policía Vial recibe un promedio diario de 180 solicitudes para atender a particulares. Ya sea por eventos deportivos, celebraciones religiosas, o manifestaciones. Todas, afirma el comisario Francisco Poe, son atendidas.

Siniestralidad: A diario, la Secretaría de Movilidad registra un promedio de 106 choques en la metrópoli.

Población: De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2001 había 3.8 millones de habitantes. Para 2013, la cifra ya estaba en 4.5 millones.

DATOS

El disparo

Guadalajara casi ha quintuplicado la cifra de autos en el padrón, pasando de 500 mil vehículos en 1995 a dos millones 300 mil en la actualidad.

Lento tránsito

La circulación promedio en la ciudad es de 17 kilómetros por hora.

Cada día hay alrededor de 300 automóviles más en la ciudad.

Actualmente son 2.3 millones de vehículos en la metrópoli; en el 2001 eran apenas 855 mil.

SINIESTRALIDAD

Cruceros de mayor riesgo

• Periférico y López Mateos. 487 accidentes en 2013.

• Periférico y Colón. 281 accidentes en 2013.

• Periférico y Solidaridad Iberoamericana. 241 accidentes en 2013.

• Periférico y Parres Arias. 231 accidentes en 2013.

• Periférico y Morelos. 221 accidentes en 2013.

• Periférico y 5 de Mayo. 215 accidentes en 2013.

• Antigua Carretera a Chapala y Periférico. 212 accidentes en 2013.

• Periférico y Vallarta. 204 accidentes en 2013.

•  Periférico y 8 de Julio. 199 accidentes en 2013.

• López Mateos y Mariano Otero. 181 accidentes en 2013.

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