Fuera, jefe policial de Zapopan y otros 16

GUADALAJARA, JALISCO (31/OCT/2014).- Ya no hubo otra prórroga. El Gobierno de Jalisco confirmó la salida de 17 directores de Seguridad Pública Municipal, entre los que destaca el de Zapopan, Hernán Guízar Maldonado. Se van porque reprobaron los exámenes de control de confianza.

Por fin se cumple con la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública, que ordenaba la depuración desde octubre de 2012, pero que fue postergada gracias a las dos prórrogas autorizadas por el Congreso de la Unión. Así, hoy vencen esos plazos y se precisan los ceses de los directores de las Policías de municipios como Zapopan, Atenguillo, Cabo Corrientes, Chapala, Chiquilistlán, Huejúcar, Mixtlán, Pihuamo, Teocuitatlán de Corona y Tolimán, entre otros. Tan sólo en éste grupo de municipios la Fiscalía General de Jalisco documenta 13 mil 221 averiguaciones previas iniciadas por robos, asesinatos, secuestros y extorsiones.

El caso más sorprendente fue la salida de Hernán Guízar Maldonado, quien ayer por la mañana se adelantó y aseguró que dejaba el cargo por cuestiones personales, pero horas después se confirmó que resultó “no apto”. Entre los policías jaliscienses, cuatro mil 415 reprobaron los exámenes; de esos, tres mil 90 tendrán una segunda oportunidad.

“El problema es que ya se agotaron los tiempos. La ley no habla de que, a partir de hoy, deban de estar evaluados o reevaluados, sino que sencillamente si no fuiste aprobado ya no puedes pertenecer a un cuerpo de seguridad pública. Están en un vacío jurídico que lo van a aplicar discrecionalmente”, lamenta José Antonio Pérez Juárez, presidente del Colegio de Abogados de Jalisco.

En contraste, mil 324 policías deben dejar de inmediato las corporaciones. Y la mitad corresponde a operativos de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque, Tonalá y Tlajomulco (662).

Hay muchas historias detrás de la “limpia”. En 2013, como policía de Zapopan, le notificaron a Gonzalo Lozano que no aprobó exámenes (son cinco en total: toxicológicos, psicológicos, de conocimientos, patrimoniales y de salud). Le endilgaron uso de drogas, abuso y hasta enriquecimiento ilícito, razón por la cual —sin mansión o auto de lujo— se amparó. El juez resolvió dejar sin efecto tales señalamientos y el procedimiento de cese en su contra. Pero ayer le ordenaron que dejara el cargo por no aprobar otros exámenes. La noticia para Gonzalo (quien se manifestaba la mañana del jueves en el Palacio Municipal en demanda de finiquitos justos) fue que no se iban solos, sino que su “cero uno”, su comandante Hernán Guízar, también.

Marco Cuevas Contreras también renunció al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.