Fiscalía estatal investiga procedencia de restos humanos disueltos en ácido

TEQUILA, JALISCO.- Aunque aún no hay una línea fija de investigación al respecto, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) ya investiga una probable conexión entre los restos humanos que se encontraban en proceso de disolución dentro de un recipiente plástico de 200 litros y la desaparición de un hombre reportada días atrás en el poblado de El Salvador, Municipio de Tequila.

De acuerdo con las fuentes consultadas, el finado era un hombre de entre 30 y 35 años, de complexión robusta y tez morena. El reporte del Servicio Médico Forense (Semefo) precisó que tenía un impacto de bala en el cráneo, lo que podría significar que le fue asestado un “tiro de gracia”.

Aunque se presumía que, por la exposición a los químicos corrosivos, el estado del cadáver complicaría en gran medida, incluso, establecer su sexo, aparentemente el cuerpo tenía poco tiempo dentro del tambo industrial, aunque, en efecto, su identidad permanece en incógnita.

De cualquier manera, la fiscalía estatal ya ha dispuesto a su área de Homicidios Intencionales para que dé celeridad al esclarecimiento de este hecho, pues trascendió que el occiso podría ser un hombre con las mismas características que fue reportado como desaparecido días atrás.

En este tenor la información ha trascendido a cuentagotas, y a pesar de que no se ha confirmado por las autoridades encargadas del caso, se sabe que el individuo en cuestión fue “levantado” días atrás del hallazgo en el poblado de El Salvador.

La víctima fue localizada gracias a un reporte anónimo que llegó a oídos de la Policía Municipal de El Arenal, la tarde del lunes pasado. En la denuncia se hacía mención que, bajo el puente del poblado de Santa Cruz del Astillero, ubicado en el kilómetro 28.4 de la carretera Guadalajara—Nogales, se encontraba un tambo industrial, en cuyo interior yacía el cadáver de una persona.

Una vez bajo alerta, los oficiales de la localidad acudieron al sitio en mención y constataron la presencia del envase, razón por la cual dieron parte a las autoridades forenses e investigadoras.
Cuando éstas últimas llegaron se corroboró que, además del cuerpo, el recipiente guardaba ácidos corrosivos.

Debido a que los restos se hallaban en el fondo de un barranco, las autoridades pidieron ayuda al cuerpo municipal de Protección Civil, cuyos rescatistas tuvieron que hacer uso de herramientas y trajes especiales para rescatarlo y entregarlo íntegro al Semefo.