Fieles custodian a la Virgen hasta la Basílica de Zapopan

ZAPOPAN, JALISCO (12/OCT/2012).- Colmada de la fe de peregrinos, la imagen de la Virgen de Zapopan llega a su santuario, en una procesión mariana considerada como la de mayor participación en el mundo cristiano, la cual se realiza desde 1734.

Es así como la Virgen de Zapopan, acompañada por cientos de miles de fieles, realizó su último recorrido de 7.5 kilómetros, partiendo de la Catedral tapatía hasta arribar a su santuario.

Luego de visitar durante seis meses 176 templos, reclusorios y hospitales de esta metrópoli, así como diversos municipios del interior del estado "La Generala" vuelve a su casa, dando su ingreso por la explanada de la Plaza de las Américas Juan Pablo II.

En esta procesión es palpable el fervor inquebrantable hacia la Virgen Zapopana, imagen con la cual Fray Antonio de Segovia realizó su trabajo pastoral en 1530 y que desde entonces ha multiplicado la fe católica no sólo en el país sino que ha logrado traspasar las fronteras.

En esta caminata resaltaron también los cánticos, los aplausos, las oraciones y principalmente la emoción trasmitida por más de 27 mil danzantes de diferentes estados que se dieron cita a esta Romería, considerada la segunda más importante de país, tras la de la Virgen de Guadalupe.

La imagen, de 34 centímetros de altura y de acuerdo a su historia hecha por manos tarascas de Michoacán con cañas de maíz, ha sido una gran evangelizadora y congrega durante todo el año a miles de católicos que la visitan en su Santuario para agradecer favores y milagros.

Este trascendente esfuerzo peregrino concluye, como cada año, con mucha tranquilidad gracias a que el objetivo primordial es acompañar a la Virgen de Zapopan en medio del fervor mariano, esperanza y envuelta en una gran fiesta que busca unir y multiplicar la fe.

A su arribo, la Zapopana fue recibida con vivas y porras, así como con una misa de recepción impartida por el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, arzobispo Emérito de Guadalajara, en la que pidió a la virgen remover el entusiasmo evangelizador y fortalecer la fe en el mundo.

En la homilía, el prelado reiteró que la Virgen María ha sido por los siglos de los siglos la promotora de la fe y en México de 1530 a la fecha es la que ha logrado que creamos en Jesucristo como nuestro único salvador.

Manifestó que sin fe y sin esperanza no hay amor ni vida cristiana y por ende no hay salvación, por lo que se debe fomentar la fe para que crezca y madure como parte del compromiso con la vida.

Exhortó a todos los fieles a cuidar l fe en las familias porque es desde el seno del hogar donde se pueden transmitir a las nuevas generaciones, así como pedir que conserve la esperanza entre los jóvenes para que tengan consuelo y luz.

Asimismo, pidió orar para que se conserve la fe en los líderes, intelectuales, políticos, empresarios y en general en toda la población, ya que nos iría mejor porque se tendría un mayor respeto por los mandamientos de la Ley de Dios.

Añadió que si creemos en Cristo con una fe coherente y verdadera, se tendrán las soluciones correctas para acabar de raíz con los difíciles problemas que se viven en la actualidad y que agobian a toda la sociedad.

Es así como la imagen de la Virgen de Zapopan, que se mantiene intacta por más de 480 años y que porta un atuendo especial con bordados en oro y piedras preciosas con motivos religiosos, dormirá en su santuario.