En medio quedan los ciudadanos

GUADALAJARA, JALISCO (12/NOV/2010).- El conflicto entre el Gobierno del Estado y la Universidad de Guadalajara crece conforme transcurre el tiempo, y más que acercarse el epílogo de la batalla, parece apenas el prólogo.

El maestro en Política y Gestión Pública por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente ( ITESO), Alberto Arellano Ríos, considera que los intereses de ambos grupos no se concentran en la gente.

“Desde hace tiempo en el campo político todo mundo enarbola los intereses de la ciudadanía, que es lo que nos importa a todos. No se ve de ninguna de las partes cómo avanzar, sobre todo que no se puede saber quién miente y quién no. La verdad no sabría decir con exactitud qué es lo que está en juego, porque puede haber una serie de elementos en los cuales cada uno tiene sus intereses con miras a las elecciones de 2012. Es la percepción que tengo como un simple espectador, que lo que menos les interesa somos los ciudadanos”.

El también candidato a doctor en Ciencias Sociales por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), señala que la UdeG puede pasar al papel de villano si abusa de las marchas: “Es el riesgo, sobre todo de parte de la Universidad de Guadalajara. Deben medir lo que están haciendo. El riesgo ahí está, se están radicalizando las posturas, y el bloqueo en las calles se le puede revertir en la opinión de la gente”.

Dice que debe haber una solución “inmediata, en todo grupo hay radicales, pero la idea y lo conveniente es que sean mesurados, que cada uno avance en el diálogo. El problema es cuando alguien quiere tomar el control y en medio (del conflicto) estamos nosotros (los ciudadanos)”.