En hora pico, a 14 kilómetros por hora en vías rápidas

GUADALAJARA, JALISCO (27/ENE/2014).- Alguna vez se ha preguntado por qué se llena Lázaro Cárdenas si no tiene semáforos, o cómo es que López Mateos se satura precisamente en dirección Sur en el periodo de viaducto. Los factores son muchos, pero el más importante es que las avenidas más importantes de la ciudad están completamente rebasadas, particularmente en las llamadas “horas pico”. Sólo basta tomar López Mateos, del Periférico a la Glorieta Colón de 7:00 a 9:30 horas, en donde un recorrido de 11 kilómetros implica 57 minutos de lento tránsito. Es decir, el promedio de velocidad Sur-Norte a la hora de la entrada a los colegios y a los trabajos es de 11 kilómetros por hora.

Otro ejemplo es Avenida Patria, en el tramo entre Acueducto y  Moctezuma a las 19:00 horas: son 7.4 kilómetros que se recorren en 40 minutos, unos 11.1 kilómetros por hora, muy por debajo del promedio de velocidad de la ciudad, que se ubica por encima de los 20 kilómetros por hora.

Lázaro Cárdenas, tráfico sin semáforos

En Lázaro Cárdenas la situación es muy complicada porque ya todos los semáforos están eliminados y aun así existen graves problemas de tráfico en muchos puntos de esta arteria. “Lázaro Cárdenas es la única vialidad que conectada con Vallarta, ya no tiene semáforos. Sin embargo, a la hora que tú ves la hora pico se sigue dando el tráfico, aun cuando la infraestructura ya no tiene ningún dispositivo que detenga, es la sobrecarga la que produce problemas de tráfico en ciertos sectores de la avenida”, comenta Mario Córdova, director general del Instituto de Movilidad y Transporte del Estado de Jalisco (IMTJ).

Y así, en opinión del especialista, el problema de una avenida como Lázaro Cárdenas son sus entradas, giros mal hechos, accidentes y entrecruzamientos. “Son vías (como Lázaro Cárdenas) que tienen puntos de entrada y salida, entrecruzamientos, curvas y distintos puntos donde se detiene el tráfico. Pero en términos generales, eso es lo que sucede, 700 mil vehículos en el área metropolitana con la infraestructura que tenemos es insuficiente”. Esto hace que la diferencia entre circular en hora pico y en horario de tráfico fluido, sea muy grande. La velocidad en hora pico supera apenas los 17 kilómetros por hora; sin embargo, a las 11:00 horas o a las cuatro de la tarde, la velocidad casi alcanza los 60 kilómetros por hora en promedio en esta vía.

Y es que una observación de la avenida deja en claro algunos problemas de tráfico muy importantes en Lázaro Cárdenas. Por ejemplo, las entradas a los carriles centrales, particularmente en el tramo entre 8 de Julio y Colón, o entre la Carretera a Chapala y el Nodo Revolución, provocan descensos muy importantes en el tránsito.

Desde el punto de vista de Córdova España es necesario realizar una “acupuntura urbana” que resuelva estos problemas desatendidos. “Se requiere además de acciones de gestión inteligente del tráfico, se requieren intervenciones de “acupuntura urbana”, pero también quirúrgicas que fueron postergadas en su tiempo. No es posible que yendo por Periférico antes de llegar a la Calzada te encuentres con dos casas que en su tiempo no pudieron mover, siguen los juicios y nadie le mueve para quitar las obstrucciones”.

EL DATO
A vuelta de rueda

En las principales calles y avenidas de la ciudad el tráfico se complica en las llamadas horas pico, que comprenden de 7:00 a  9:00 horas, de 14:00 a 16:00 y de 18:00 a 21:00 horas.

PARA SABER

60 kilómetros por hora, el límite de velocidad en la mayoría de las calles de la ciudad

80 kilómetros por hora, el límite de velocidad en vías como Periférico

20 kilómetros por hora, la velolcidad promedio a la que se circula en la ciudad

57 minutos toma el recorrido por López Mateos entre Periférico y la Glorieta Colón

Mezcla de tráfico en Periférico

No todo el problema de nuestra circulación lenta y, en ocasiones caótica, se origina por vehículos de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG). Un hecho es que Guadalajara es un centro regional de mucho peso, clave para el comercio y el turismo, particularmente entre el Occidente y el Centro, la costa y el Centro, así como el Noroeste y la capital del país. La saturación del Periférico se explica, en gran parte, por una composición del tráfico que obstaculiza aún más el tránsito. Camiones de carga, camiones de paso, autobuses que no respetan y rebasan por donde se les da la gana.

Los principales puntos de congestionamiento de Periférico precisamente coinciden con los puntos de entrada a la ciudad.

“Periférico trae una composición de tráfico de carga muy alta. Las siete entradas de la ciudad tocan con el Periférico, hay muchos viajes que no tienen que ver con la ciudad, que son de paso, pero que se internan. Es un tráfico urbano que se combina con un tráfico regional”, considera Mario Córdova.

Así, los cuellos de botella en Periférico son la salida a Puerto Vallarta y a la Ciudad de México por el corredor Lázaro Cárdenas-Vallarta; la salida al Sur y a Manzanillo por López Mateos, y también la salida a Chapala, en su intersección con Periférico. La intersección que tiene con López Mateos es uno de los puntos más transitados de la ciudad.

¿Hay soluciones?

Para Mario Córdova España el diagnóstico no tiene muchas vueltas: ha faltado voluntad política para entrarle de lleno a resolver estos problemas de tráfico que no dependen de grandes soluciones. Y todo empieza en el Gobierno. “Ha faltado responsabilidad técnica de los que han gobernado. Se necesita implementar sistemas de tráfico inteligente y resolver desde las cosas más sencillas hasta los riesgos mayores”.

Y es que, en opinión de Córdova España, se ha abandonado de raíz la construcción de vías alternas, que no necesariamente tendrían que ser para los autos, pero que sí ayudarían a desahogar el tránsito del transporte público a arterias alternas. “La ciudad debería reformular sus planes de circulación vial. Hay problemas de capacidad, pero también faltan vías alternas. No dudo que como en otros tiempos se hizo, tendrían que construirse nueva infraestructura vial orientada al transporte público”.

Al mismo tiempo, hay un grave problema de sobreutilización de algunos corredores, pero también un espacio urbano subutilizado. Lo vemos claramente en las concesiones del transporte público y lo que realmente se utiliza. Solamente una cuarta parte de los kilómetros concesionados a los camiones se explota en la ZMG. “Sólo para que te des una idea, en las rutas concesionadas o subrogadas, se han dado alrededor de 15 mil kilómetros de ruta, pero sólo se utilizan cuatro mil. Hay un nivel de sobreposición muy alto, casi todas las avenidas hay muchas rutas compitiendo. Alcalde, en el centro, traemos tres carriles, pero dos son utilizados por el transporte”.

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