En Bolaños, común la presencia de gente armada

BOLAÑOS, JALISCO (29/FEB/2012).- Para los poblados y policías del Municipio de Bolaños no es raro ver gente armada circulando en vehículos, y que sostenga enfrentamientos en la sierra del aquel municipio, ubicado en la Región Norte del Estado.

Un padre de familia, vecino de la cabecera municipal de Bolaños, mencionó que es común ver el paso de gente fuertemente armada en camionetas lujosas o por lo menos que sean de doble cabina.

“Los ves cuando pasaban por la carretera, ya sea hacia a Los Amoles o para Chimaltitán o San Martín de Bolaños, y nadie les dice nada”, aseguró el hombre, quien trabaja en una mina de la región.

Agregó que, en las brechas que conducen a los pequeños poblados o rancherías, casi siempre se registra la presencia de células delictivas conocidas como “Los Chapos” o “Los Chapitos” (alianza entre gente de los cárteles de Golfo y del Pacífico, comandada por Joaquín “El Chapo” Guzmán), lo cual provoca miedo entre los pobladores y quienes  controlan la “plaza”.

“Si te conocen, no te dicen nada, pero, si les pareces extraño, te cuestionan a dónde te diriges y hasta te toman una foto con sus teléfonos”, explicó.

Otros vecinos entrevistados indicaron que todavía en las calles de la cabecera municipal se puede vivir un “aire” de tranquilidad, y que los jóvenes y adultos pueden andar hasta las 22:00 horas y no son molestados.

“Todo está bien, hasta que no llegan o pasan ‘Los Zetas’; mejor nadie sale de sus casas, porque son muy bravos, se puede decir que se vive con un ‘aire’ seguro”, dijo una mujer de 50 años.

Entre los testimonios recogidos se afirma que algunos indígenas de la Región Norte llegan a trabajar para “Los Chapos” o “Los Chapitos” como vigilantes e informan de quién se aproxima, en especial cuando se trata de policías estatales o militares.

“Por la carretera que va más al Norte de Jalisco y la brecha que va a Los Amoles, casi siempre se encuentran personas vigilando, se dice que en Los Amoles hay mucha gente con pistolas y rifles, que trabajan para el narco, por eso no es seguro transitar en aquella zona”, dijo un hombre de 70 años, nacido en Chimaltitán.

Por otra parte, un elemento de la Dirección de Seguridad Pública de Bolaños explicó de forma anónima que la dependencia municipal no tiene la capacidad para enfrentar a la delincuencia organizada.

“La verdad, como se dice, somos policías de rancho, y casi, casi, cuidamos que el vecino no le dé gane a un conocido con la novia, y lo de diario, que no se registren robos y actos que alteren el orden público”, manifestó el elemento.

Agregó que es difícil vivir como policía en aquella zona, y lo principal es no meterse con los “matones” del narco para sobrevivir.

“Mira, como en Chimaltitán, se dice que los sicarios se estacionan con sus camionetas lujosas frente al cuartel de la Policía Municipal y no son molestados, porque, si no, pues te acribillan, así están las cosas (...) Y pues ni hablemos del sueldo, porque es de dar risa”, dijo el municipal.

Normalmente los pobladores de Bolaños trabajan en una mina que brinda empleo unas 300 personas; otros se mantienen de la venta de ganado y de pequeños negocios, como tiendas de abarrotes, papelerías y giros de ese estilo.

PARA SABER
Enfrentamiento

Cuatro presuntos sicarios fallecidos, uno más detenido y un policía rural lesionado fue el resultado de un enfrentamiento entre policías estatales e integrantes de un grupo delincuencial, conocido como Cártel Jalisco Nueva Generación, registrado el lunes pasado en el municipio de San Martín de Bolaños, en la Región Norte del Estado.