El ''piojito'', las caricias y los mimos relajan y alivian males

GUADALAJARA, JALISCO.- ¿Quién no recuerda las caricias, mimos y abrazos que nuestros padres nos prodigaban  cuando éramos pequeños? En especial cuando no podíamos conciliar el sueño o estábamos tristes, y nos hacían el famoso “piojito”, que aliviaba nuestros males y nos hacía dormir.

Pues este ejercicio, con el que ellos nos demostraban su amor, es saludable porque proporciona relajación, puede acabar con un dolor de cabeza, nos alivia si estamos cansados e incluso combate la tensión nerviosa.  

En el caso de los adultos funciona de la misma manera: cuando reciben un masaje en la cabeza, se estimulan los centros nerviosos del cuero cabelludo y los relaja de inmediato.

A pocas personas no les gusta que les acaricien la cabeza, y es que el agradable efecto ayuda a combatir las enfermedades de esta época, causadas por el ajetreo de la vida diaria, el trabajo, las responsabilidades, el tráfico y las preocupaciones cotidianas.

Así es, el “piojito” le proporciona tranquilidad, aleja el insomnio, disminuye el cansancio y en algunos casos, alivia dolores de cabeza y combate la migraña.

Las caricias  

Todos los seres humanos requieren de caricias desde el momento en que nacen, pues al dejar la seguridad y el calor del vientre de la madre, necesitan el contacto de piel a piel con ella.

En caso de no tener el afecto y las caricias necesarias, aseguran especialistas, muy probablemente se puedan presentar problemas de personalidad que podrían terminar en adicciones y en circunstancias graves como el suicidio, porque se crece con la carencia de cariños y caricias, lo que significa que la persona no se siente querida y aceptada.

Estos problemas se pueden presentar sobre todo en la adolescencia, porque es cuando la persona está más susceptible al no tener definido qué hará de su vida y cuáles son sus aspiraciones.

Si en esa etapa la persona tiene miedo o siente que está abandonada, este sentimiento puede acompañarla toda su vida; pero si en cambio, recibe desde la infancia amor y caricias, está comprobado que la inteligencia, el carácter y los sentimientos serán fortalecidos.

Las caricias son necesarias para nuestro bienestar psicológico, son como la gasolina que nos permitirá avanzar en el tramo de nuestra vida afectiva y emocional.

Los abrazos

Los abrazos son una terapia que produce bienestar, reduce la presión arterial y la ansiedad, y levanta de una manera espectacular la autoestima.

En este caso, la autoestima de las dos personas que comparten el abrazo se ven afectadas positivamente, porque este contacto físico las llena de energía.

Se recomienda recibir de cuatro hasta 12 abrazos diarios, pero debe recordar que cada cabeza es un mundo y existen personas a las que no les gusta el contacto físico, y es algo que tenemos que respetar.

¿No hay quien lo abrace? ¡Hágalo usted mismo!

Si usted está en una etapa de su vida en la que se siente solo y este artículo le resulta incómodo, Su Salud le aconseja que se abrace a usted mismo.

¿Cómo hacerlo? Es fácil, puede apapacharse teniendo presente la gran persona que es y dándose todo el amor que está en su interior, porque lo merece.

Recuerde todos aquellos momentos agradables que ha vivido, a las personas que ha hecho felices, todo lo que ha logrado a lo largo de su vida y se dará cuenta que no sólo se merece ese abrazo, sino muchos.

Con este ejercicio sabrá que usted mismo se pueda dar además de abrazos, protección, confianza y seguridad para seguir con su vida y salir adelante ante cualquier situación.

Adultos mayores

Si usted es afortunado y aún tiene a sus padres o a sus abuelos, demuéstreles su cariño con abrazos. Hágales saber que tienen un espacio especial en su vida. Los adultos mayores son susceptibles a deprimirse porque muchos de sus seres queridos o compañeros ya no están con ellos, y el afecto y el tiempo que usted les pueda dar serán de mucha ayuda para su estado anímico.

PARA SABER

Los abrazos, las caricias y las demostraciones de afecto que podamos dar y recibir benefician a muchas personas. Recuerde que tiene muchos prospectos para consentir y la próxima vez que tenga enfrente a sus padres, hijos, hermanos, tíos, sobrinos, primos, pareja o a un buen amigo que hace tiempo no veía, deles un fuerte abrazo y estará regalando y recibiendo salud.

Recomendaciones

Si tiene hijos pequeños, llénelos de afecto y acostumbre acariciarles la cabeza cuando no puedan dormir, esto fortalecerá sus vínculos y hará de ellos personas queridas y más seguras en la vida.

Los adultos olvidan expresar sus sentimientos, sobre todo a los seres queridos; demuéstrelos con un abrazo.

Los adolescentes son un caso aparte y requieren de atención especial y mucho amor.

Si de momento no tiene quién lo abrace, hágalo usted mismo y valore todas las cosas buenas que ha hecho en su vida y lo que lo rodean.

Demuestre a su pareja su cariño con abrazos y caricias, esto fortalecerá su relación.