El futuro, en manos ciudadanas

Una vez más, por desacuerdos políticos, los tapatíos hemos aplazado una decisión fundamental para la ciudad. La oportunidad de tener un sistema de transporte público más moderno en beneficio de un gran número de usuarios, se ha pospuesto porque los actores políticos del Gobierno del Estado, los municipios y la Universidad de Guadalajara han privilegiado sus intereses personales a la gran agenda de ciudad.

La visión electorera, la agenda de los partidos y temas de corto plazo prevalecieron sobre la visión de largo alcance.

Los ciudadanos requerimos que las decisiones fundamentales se tomen en función de los elementos que le den al Estado viabilidad y certeza de futuro. Hay que poner la mira en largo plazo. Los ciudadanos requerimos que existan reglas mínimas entre la clase política para la toma de decisiones.

Jalisco no puede seguir siendo rehén de la falta de acuerdos. Necesitamos certeza técnica y jurídica sobre los grandes proyectos del Estado, para que las decisiones no queden sujetas al interés y las interpretaciones de los funcionarios en turno.

Los ciudadanos debemos tomar las riendas del futuro. La ciudad y el Estado son demasiado importantes como para dejarlos en manos de los políticos.