El IMSS niega negligencia en caso de bullying

GUADALAJARA, JALISCO (20/MAR/2013).- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco descarta negligencia médica en el caso del menor que murió en el Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional de Occidente (CMNO), supuestamente a consecuencia de un ataque de bullying, y advierte que la atención que se le brindó en sus hospitales fue adecuada.
 
Tras un par de semanas de silencio en el tema por parte de la institución, este miércoles se avisó de improviso de una rueda de prensa, misma que encabezó el jefe de Prestaciones Médicas, Manuel Cervantes Ocampo.
 
"Quiero ser muy cuanto, muy preciso, en que al niño se le trató adecuadamente, en todo momento, por médicos especialistas del IMSS; inclusive, su envío a tercer nivel, fue para reforzar todavía el pronóstico de la situación del niño".
 
El médico informó que el niño acudió el 20 de febrero al Hospital de Lagos de Moreno, con dolor abdominal leve y náuseas. Sus signos vitales eran normales, por lo que se le dio un tratamiento "conservador" y se envió a su casa. Sin embargo, la familia no refirió ningún maltrato.
 
Iniciada la madrugada, la familia volvió al hospital con el niño, quien ya presentaba signos de ansiedad, y fue hasta entonces cuando se refirió que había sufrido maltrato en su escuela, y que sus compañeros lo trataron de asfixiar con un vaso de agua, comentó el médico.
 
Sin embargo, fue hasta el día siguiente, es decir, el 20 de febrero, cuando fue visto por el área de psicología y salud mental del hospital, además de que le realizaron diversos exámenes médicos.
 
"Por supuesto, nosotros, en ese momento, cambia el panorama al hacer un interrogatorio exhaustivo a los padres y a la abuela del niño (...) en ese momento nos adecuamos a dar el tratamiento siguiente, a hacer estudios de laboratorio y gabinete; radiografías y una tomografía, en donde encontramos una neumonía intersticial, muy probablemente por la aspiración de agua y líquido al que fue sometido".
 
El menor falleció el nueve de marzo, en el hospital antes referido, y las causas de su muerte, según el IMSS, fue infarto cerebral secundario a encefalopatía hipóxico isquémica, hemorragia, síndrome de hipertensión intracraneana y neumonía.
 
Cervantes Ocampo sentenció que la familia no dio datos en el primer contacto con el hospital, y que la información se fue dando a "cuenta gotas", por lo que al no tener datos, los médicos consideraron que el menor podría traer alguna enfermedad común entre los escolares, como la gastroenteritis.

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