El Bosque Mesófilo del Nevado de Colima será un Área Protegida

GUADALAJARA, JALISCO.- Es una fábrica de agua. Un ecosistema que sobrevive en forma de isla y que por su naturaleza aislada es de los más vulnerables a desaparecer. Es el Bosque Mesófilo del Nevado de Colima que, debido a las fuertes amenazas de incendios, tala inmoderada y ganadería, la Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) hará en junio la declaratoria del sitio como la primera área natural protegida de carácter estatal.

La dependencia anunció esta mañana que la consulta pública ha concluido (comenzó el 6 de marzo y duró 60 días), por lo que están listos para que la Secretaría General de Gobierno agilice el trámite del decreto de las siete mil 203 hectáreas (ubicadas alrededor del Volcán Nevado de Colima, en Zapotitlán de Vadillo, Tuxpan y Zapotlán el Grande).

La investigadora Sonia Navarro, del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), quien comenzó a estudiar la zona hace 10 años, resalta que la importancia de proteger los bosques mesófilos (su cobertura nacional era del 2% y ha disminuido al .8%) es que son proveedores de agua y si “los quitamos ya no habrá este recurso vital para la vida activa de los pobladores”; son protectores del suelo (la erosión en estas tierras montañosas es una de las principales causas de pérdida de biodiversidad); y permiten la captura del carbono, fundamental para contrarrestar el cambio climático global.

“Estamos comprometidos a cuidarlos porque quedan muy pocos y porque a pesar de su cobertura a nivel nacional, son altamente diversos. Antes se consideraba la selva alta perennifolia como la de mayor diversidad, en el Sur de México, pero por unidad de superficie, se ha determinado que estos bosques son los más diversos”.

Sonia Navarro aún encuentra sorpresas en lo que será un parque estatal. Cuenta que hay tres especies de nuevas plantas: “Estamos tratando de identificar una especie de árbol, hay especies casi endémicas, otras siete son de categoría de protección especial, una especie de búho cornudo que solo se encuentra en ecosistemas en muy buenas condiciones, murciélagos, carnívorosÊ y de las familias más diversas, como los colibrís”.

Después de que se realice la declaratoria de área natural protegida, que “ayudará a fortalecer los corredores que están en la región colindando con el Estado de Colima”, la Semades elaborará el plan de manejo a realizarse en consenso con las poblaciones.

De acuerdo con la titular de Semades, Martha Ruth del Toro, la Comisión Nacional Forestal y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) aportará nrecursos para generar proyectos de empleo temporal y darle una alternativa de trabajo a la gente.


Las siguientes declaratorias estatales serán las del bosque de maple de Talpa, y el cerro del Águila, en los municipios de Ameca, Etzatlán y Ahualulco.

En detalle

El bosque mesófilo de montaña o bosque de neblina es considerado la comunidad vegetal más diversa del país por unidad de superficie. Son ecosistemas testigos de la transición entre los bosques templados y las selvas húmedas y se encuentran asociados a barrancas o cañadas.

Las siete mil 213 hectáreas (en los municipios de San Gabriel, con 408 hectáreas; Tuxpan, con dos mil 538 hectáreas; Zapotitlán de Vadillo, con tres mil 682 hectáreas; y Zapotlán El Grande, con 584 hectáreas) que serán declaradas área natural protegida en categoría estatal, tendrán la definición de parque estatal, es decir, son aquellas áreas de uso público, constituidas por el titular del Ejecutivo, cuya belleza escénica es representativa, tienen valor científico, educativo y de recreo, y valor histórico por la existencia de flora y fauna. En estas zonas solo se permite realizar acciones relacionadas con la protección de los recursos naturales.

El proceso de la declaratoria inició con un foro en octubre, al que acudieron ejidatarios, particulares e instituciones. El 5 de marzo se publicó en el Periódico Oficial del Estado de Jalisco y se dieron 60 días para su consulta. Lo que sigue es emitir la declaratoria, formalizar la administración del área y establecer el Consejo Asesor, y crear el Programa de Conservación y Manejo.